Este verbo que llega al nivel de la lengua culta familiar del Perú es un obvio derivado de deshielo y corresponde a la forma académica deshelar(se), la cual no ha caído totalmente en desuso entre nosotros. Según el académico Diccionario de americanismos (2010), deshielar(se) se registra también en la República Dominicana, Ecuador, Bolivia y Chile, tanto en uso transitivo como pronominal.