Áncash: desarticulan clan y dan golpe a minería ilegal [FOTOS]

La Fiscalía Ambiental del Santa y la Policía de Chimbote desarticularon al clan familiar Amoroto, que se dedicaba a la minería ilegal en el distrito de Nepeña, en la provincia del Santa, región de Áncash.

La interdicción se inició el pasado martes y concluyó el jueves con la destrucción de los equipos de beneficio de los metales. En el primer día, arrestaron al supuesto cabecilla de la organización criminal Moisés Orlando Amoroto Castro, de 30 años, y a sus familiares Pedro Amoroto Enríquez, de 27, Julio Jesús Amoroto Telles, de 36; así como a los obreros Walter Paul Reyes Cure, de 54, Jorge Luis Otiniano Luján, de 41, José Luis Velásquez Huamaní de 54, y Américo Enrique Flores Gaspar, de 54, y Herminio Bustos Rodríguez de 56.

La titular de la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental, Evelyn La Madrid Vences, sostuvo que la operación significa un duro golpe a la minería ilegal y uno de los más grandes en el país.

“La fiscalía ha dado un duro golpe a la minería ilegal por los graves daños al medioambiente. Este clan usaba mercurio y cianuro para obtener el relave de oro, sin estimar las terribles consecuencias al aire, al suelo y subsuelo”, manifestó a El Comercio.

Propiedad de proyecto Chinecas

Los Amoroto instalaron su centro minero ilegal sobre 20 hectáreas de terreno en el sector La Carbonera, de propiedad presuntamente del proyecto irrigador Chinecas del Gobierno Regional de Áncash, desde el 2012. Tenían una autorización para la extracción de minerales, pero no para el procesamiento, sin embargo, la Dirección Regional de Energía y Minas nunca constató las pésimas condiciones en las que laboraban más de 30 obreros.

En el lugar se halló una zona de extracción con 11 socavones y tres puntos de beneficio de mineral metálico. En estos últimos se procesaban la piedra extraída en grandes molinos eléctricos y luego el material pulverizado se mezclaba con mercurio para obtener el concentrado de metales y llevarlos a otra ciudad para su venta.

Además, se registraron 12 toneladas de relave, 25 equipos electrógenos, 21 quimbaletes, 8 molinos, tres vehículos, 2 compresoras, y gran cantidad de herramientas para la extracción del mineral. Se estima que la inversión sobrepasa el millón de soles.

Efectivos de la División de Seguridad Contraminas de la Policía Nacional y más de 65 agentes de la División Policial de Chimbote ejecutaron la orden de destrucción, según lo establece el Decreto Legislativo N° 1100.