Áncash: detenidos y calles desiertas en la primera noche de toque de queda | CRÓNICA

La Policía Nacional detuvo a 48 personas, en las ciudades de Chimbote y Huaraz, que incumplieron la inmovilidad social obligatoria para evitar el impacto del coronavirus, en la región Áncash.

Efectivos de la comisaría de Huaraz arrestaron a 20 ciudadanos, algunos libaban licor y otros deambulaban en la vía pública sin alguna justificación. Los detenidos, entre ellos una mujer, fueron trasladados al Departamento de Investigación Criminal donde permanecerán retenidos durante 24 horas.

Durante las primeras horas del toque de queda, agentes de la Policía Nacional y miembros de la Marina de Guerra del Perú arrestaron a 28 vecinos en Chimbote. Varios de ellos se mostraron desafiantes a la autoridad y pidieron que se les facilite mascarillas para evitar el contagio del COVID-19.

Las principales avenidas del casco urbano lucen vacías, se observan a pocos vehículos particulares, mientras que los negocios y casas han cerrado sus puertas. No obstante, los policías y militares resguardan la localidad porteña.

"Esto no es una burla, es algo serio. Si nunca han aprendido a respetar la ley, la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas les van a enseñar a hacerlo. Todos deben acatar la norma suprema", comentó el teniente gobernador del pueblo joven Bolívar, William Vidal.

En el distrito de Coishco, los custodios arrestaron a dos jóvenes que se encontraban en el frontis de una bodega. Ellos conminaron a los moradores a ingresar a sus hogares para que cumplan con el estado de emergencia, a pesar de la molestia de estos.

En la provincia de Huarmey, el alcalde provincial Elmer Dueñas, agentes de Seguridad Ciudadana y efectivos de la Policía Nacional patrullan las calles de la localidad para verificar que se cumpla con el decreto supremo del Ejecutivo.

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