Áncash: se reportaron huaicos en tres provincias de la región

Tres provincias de la región Áncash vienen siendo afectadas por las lluvias torrenciales y huaicos desde el último jueves. Las autoridades han reportado perjuicios en la agricultura y en las viviendas de los pobladores de los distritos de Pariacoto (Huaraz), Yaután (Casma), y las localidades de la provincia del Santa: Moro, Nepeña, Samanco, Jimbe, Chimbote y Nuevo Chimbote.

El prefecto de Áncash, Alex Cordero, informó que tres casas de adobe en Pariacoto han sido destruidas por las intensas precipitaciones y que en Yaután hay más de 28 familias damnificadas. Además, que los agricultores han perdido sembríos de mangos y paltos.

El alcalde de Jimbe, Jaime Carrión, indicó que las vías de acceso a los 39 caseríos del distrito se han quedado incomunicados. El huaico ha destruido viviendas, terrenos de cultivos, canales de regadío y tuberías de agua potable. "Necesitamos maquinarias para restablecer la carretera de acceso a los caseríos, además de alimentación y agua para las familias de la sierra", solicitó el burgomaestre. 

En Samanco, el río Nepeña se ha desbordado, pero no se han registrado afectados, mientras que en San Jacinto ya están restableciendo las vías de acceso de seis barrios que se habían quedado aislados. 

Piden declaratoria de emergencia

La autoridad política del Gobierno ha pedido ayuda a Instituto Nacional de Defensa Civil para que puedan enviar alimentación, agua y carpas donde las familias puedan pasar el día. 

En tanto, el secretario de la Plataforma de Defensa Civil de la Provincia del Santa, Guillermo Abril León, indicó que 800 hectáreas de cultivos en la zona rural de Chimbote y Nuevo Chimbote fueron afectadas por el desborde del río Lacramarca.

Las autoridades han acordado pedir al Gobierno Central que declare en estado de emergencia a la provincia del Santa debido al peligro que corren diversos sectores ante la posible avenida de huaicos.

El congresista ancashino Carlos Domínguez Herrera también se ha sumado a la solicitud, luego de los desbordes producidos por el río Lacramarca que afectó diversos sectores en Chimbote y Nuevo Chimbote y cuyo aumento amenaza más de 10 mil hectáreas de productos de pan llevar.

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