Así se gasta el presupuesto del Ministerio del Interior - 3
Así se gasta el presupuesto del Ministerio del Interior - 3
Jorge Falen

La lucha contra la inseguridad ciudadana es la principal demanda que se le hace al actual gobierno. Según la reciente encuesta urbano-rural de El Comercio-Ipsos, el 56% de la población considera que esta es la medida que debe priorizarse en los próximos meses.

“Es muy importante equipara la , darle mejores condiciones de trabajo, que [los agentes estén] mejor  remunerados, con salud y pensiones”, declaró ayer el presidente Pedro Pablo Kuczynski durante las celebraciones por el Día de Santa Rosa de Lima, patrona de la Policía Nacional del Perú. 

Algunas de las medidas adoptadas por el Ejecutivo apuntan  en ese sentido. Además de implementar el quinto tramo del aumento remunerativo de los policías antes de fin de año, el proyecto de ley de presupuesto público del 2017 contempla una inversión de hasta S/150 millones  para el Fondo Especial de Seguridad Ciudadana, creado desde el 2011 y destinado a la disminución de la inseguridad en este nivel. 

En la siguiente imagen mira en detalle cómo se gasta el presupuesto del Ministerio del Interior

— Brecha pendiente—
Junto al incremento salarial y presupuestal para las operaciones policiales, los planes del gobierno también abarcarán la infraestructura policial. Se aprovechará por primera vez la participación del sector privado en proyectos de seguridad mediante la aplicación del sistema obras por impuestos, que consiste en el pago del Impuesto a la Renta a través de la ejecución de un proyecto de obra pública.

 La Asociación de Bancos del Perú (Asbanc) invertirá mediante este mecanismo S/28, 3 millones en la renovación y equipamiento de 12 comisarías en La Libertad, Piura y Huancavelica. Este proyecto se extenderá a 500 locales adicionales en los próximos cuatro años. 

La comisaría es el primer eslabón en la provisión estatal del servicio de seguridad ciudadana. En ella se interpone una denuncia o se puede rendir una manifestación. Según el último Censo Nacional de Comisarías, elaborado en el 2015 por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), hay 1.470  dependencias policiales en todo el país. Sin embargo, la mayoría de estas carece de los elementos necesarios para cumplir con sus funciones. 

Si bien el 96% cuenta con acceso a servicios básicos (agua, desagüe, electricidad), solo el 62% los tienen de forma adecuada, es decir, con disponibilidad permanente. Asimismo, el 68% tiene acceso a información de requisitorias y apenas un tercio puede ingresar al sistema de denuncias policiales.  

Según un estudio elaborado por Apoyo Consultoría, la brecha en comisarías a escala nacional asciende a S/2.663 millones, monto que equivale al 30% del actual presupuesto que recibe el Ministerio del Interior (poco más de S/9.300 millones). De esta brecha calculada, el 56% (S/1.488 millones) corresponde a las comisarías en mal estado, y el 44% restante (S/1.175 millones) a la falta de comisarías. Asbanc, según información del Ministerio del Interior, estima necesaria la construcción de 864 nuevas comisarías para garantizar una cobertura mínima en todo el país. 

— Inversión esperada—
Si bien la puesta en marcha de mecanismos de inversión como el de obras por impuestos reducirá una parte de la brecha en seguridad,  este problema aún encierra una dimensión presupuestal. 

Aunque el presupuesto aumentó en 85% respecto del 2011, el gasto de capital –que incluye la construcción, equipamiento y ampliación de las comisarías del país, así como la adquisición de armamento– todavía representa apenas el 5% de este monto. El resto se destina al gasto corriente, que incluye los salarios de los policías y diversos gastos administrativos que van desde combustibles y uniformes hasta pensiones. 

 Carlos Casas, investigador de la Universidad del Pacífico en temas presupuestales, explica que debe incrementarse la participación del gasto de capital dentro del presupuesto de seguridad. “El gasto corriente es un componente importante. Sin embargo, los futuros incrementos presupuestales deben destinarse prioritariamente a la inversión de capital. La experiencia en otros países señala que este rubro representa entre el 30% y 40% del presupuesto en seguridad”, dice Casas.

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