Un equipo de la Defensoría del Pueblo advirtió, tras una supervisión, los graves problemas que afrontan los ciudadanos, en especial las mujeres, del pueblo indígena Urarina, en la región Loreto. En esta zona tienen limitaciones para acceder a los servicios de educación, salud, justicia, entre otros.
Durante la supervisión, realizada en la cuenca del río Chambira, se corroboró que el mínimo porcentaje de asistencia de alumnas mujeres indígenas al colegio secundario de la comunidad y se verificó las dificultades que tienen los escolares para trasladarse vía fluvial desde sus comunidades a la institución educativa, lo que genera la deserción escolar.
Asimismo, se advirtió la poca posibilidad que tienen las mujeres para lograr una sanción a sus agresores ante situaciones de violencia familiar y sexual. Entre las limitaciones más frecuentes está la lejanía e inaccesibilidad geográfica de las comisarías.
Una mujer de la cuenca del río Chambira debe desplazarse entre dos y siete seis vía fluvial para llegar a la comisaría más cercana, y para acceder a un juzgado entre tres y siete días. Además, la mayoría de ellas no dominan el castellano y los servicios que ofrece el Estado no cuentan con traductores o intérpretes.
Ante todo lo encontrado, el defensor del Pueblo, Eduardo Vega Luna, invocó a las autoridades a tomar acciones para revertir esta situación que afecta la integridad y desarrollo de esta parte de la población.
"La Defensoría del Pueblo también tomó conocimiento de las quejas respecto de algunos programas sociales, como Qali Warma, Pensión 65 y JUNTOS, por lo que se solicitó brindar información oportuna y comprensible sobre los criterios de permanencia de los beneficiarios", precisó el documento enviado por el defensor del Pueblo.
En el pueblo indígena Urarina 305 personas, entre niños y adultos, no contarían con su Documento Nacional de Identidad.