Comisión de Ética: cinco claves de la crisis que atraviesa

Juan Carlos Gonzales, congresista de Fuerza Popular, se acaba de convertir en el segundo presidente de la Comisión de Ética en el actual Parlamento que ha renunciado a su cargo en medio de controversias relacionadas al trabajo de este grupo.

La confirmación por parte de Gonzales de querer abandonar el cargo se convierte así en el último hito de un historial de controversias que han plagado a la Comisión de Ética en los últimos dos años. Aquí recordamos los últimos acontecimientos en cinco puntos clave.

1. La primera renuncia

El fujimorista Segundo Tapia fue el primer presidente de la Comisión de Ética del actual Congreso, pero no llegó a cumplir un año en el cargo. En mayo del 2017, los informes que había presentado este grupo de trabajo no lograron los resultados esperados.

Inicialmente, había recomendado en sus informes suspender por 120 días a Yesenia Ponce, congresista de Fuerza Popular, y por 30 día al aprista Elías Rodríguez. Sin embargo, antes de llegar al pleno, la comisión con Tapia como presidente retrocedió y decidió rebajar dichas sanciones a simples amonestaciones.

En el pleno también se procedió a rechazar el informe que recomendaba suspender por 90 días a Clayton Galván. Tras esta decisión, Segundo Tapia no solo renunció a la presidencia sino que pidió abandonar la Comisión de Ética. En su reemplazo, Fuerza Popular designó a Milagros Salazar, mientras que el cargo de presidente lo asumió Juan Carlos Gonzales.

2. Polémicos archivamientos

Hasta la fecha, la Comisión de Ética no ha tenido resultado alguno a nivel del pleno del Congreso. Además de los tres casos arriba presentados, en el 2017 también recomendaron suspensiones contra Maritza García cuando todavía era miembro de Fuerza Popular y contra el oficialista Carlos Bruce. El primer caso fue devuelto a la comisión, y el segundo todavía sigue a la espera de su respectivo debate.

A esto hay que sumarle que la Comisión de Ética ha llevado a cabo numerosos archivamientos de casos controversiales, siendo el más recordado en diciembre del 2017, cuando decidieron no llevar a cabo investigaciones contra los congresistas fujimoristas que intervinieron en el allanamiento fiscal de los dos locales partidarios de Fuerza Popular.

En esta lista estaba incluida la congresista Rosa Bartra, presidenta de la Comisión Lava Jato, quien había negado haber interferido en la diligencia fiscal, pese a que el fiscal José Domingo Pérez sostuvo lo contrario.

3. Renuncias y suspensiones

Luego de estos archivamientos de casos, comenzaron a surgir las disidencias dentro de la Comisión de Ética. Yonhy Lescano, de Acción Popular, presentó su renuncia al grupo de trabajo, así como Alberto Oliva, de Peruanos por el Kambio.

En paralelo, Alianza para el Progreso y el Frente Amplio anunciaron que suspenderían su participación en este grupo de trabajo a la espera de una restructuración.

4. Yesenia Ponce otra vez

La fujimorista Yesenia Ponce, una de las más denunciadas en la Comisión de Ética, volvió a convertirse en uno de los puntos más polémicos en la agenda de la Comisión de Ética, luego de que esta volviera a sesionar con la tarea prioritaria de analizar las acusaciones contra Kenji Fujimori, Guillermo Bocángel, Bienvenido Ramírez y Moisés Mamani.

Ética aprovechó la sesión en la cual decidieron abrir investigación contra los tres congresistas del bloque de Kenji Fujimori para archivar las denuncias contra Yesenia Ponce, acusada de haber pagado S/10.000 al ex director del colegio donde ella asegura haber terminado su secundaria en su hoja de vida.

Otra decisión que tomaron fue, por unanimidad, aprobar el inicio de indagaciones contra Jorge del Castillo y Marisa Glave por presuntamente haber irrumpido en un acto de la Municipalidad de Barranco, en referencia a la subasta que realizó dicha comuna del estadio Unión.

5. La segunda renuncia

Solo dos días después de que se lleve a cabo esta decisión, que fue recibida con críticas por parte de bancadas como Acción Popular y Peruanos por el Kambio, Juan Carlos Gonzales presentó ante Fuerza Popular su decisión de renunciar de forma irrevocable al cargo de presidente de la Comisión de Ética Parlamentaria.

Hasta el cierre de esta nota, la única explicación que ha dado el fujimorista es que abandona el cargo por "motivos de carácter personal".