El presidente de la Corte Suprema, Enrique Mendoza, negó que haya algún tipo de presión por parte del Gobierno sobre el Poder Judicial como lo dejó entrever el juez Javier Villa Stein cuando estuvo a cargo interinamente de la presidencia del Poder Judicial.
“Como representante del Poder Judicial puedo sostener que no ha habido ninguna presión de ningún representante del Ejecutivo o del Legislativo, es más nosotros no vamos a permitir ningún tipo de presión política, ni económica ni de la prensa. Si un juez se deja presionar pierde la imparcialidad que se requiere para resolver los asuntos judiciales”, declaró a los periodistas luego de haberse reunido con el presidente del Congreso, Fredy Otárola.
El magistrado también se refirió al programa Servir. Manifestó que “tal como está planteado en este momento no es aplicable al Poder Judicial. Tiene muchos aspectos por resolverse y aplicarlo así significaría una pérdida de derechos para el sector judicial”, dijo.
HUELGA JUDICIAL
En otro momento Mendoza sostuvo que la huelga que los trabajadores del Poder Judicial tienen prevista iniciar el 25 de marzo tendría consecuencias muy negativas para el país y que, por esa razón, debe ser solucionada lo más pronto posible. “Es racional resolver dentro de los cánones y procedimientos legales esta reclamación que consideramos justa” , subrayó.
Expresó que la solución está en manos del Ministerio de Economía y Finanzas. “Es el que maneja la caja fiscal , tiene sus propios procesos y esperamos que la petición de los trabajadores sea atendida en los próximos días”.