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Una comisión dentro de la bancada de Fuerza Popular evaluará una eventual sanción contra el congresista Kenji Fujimori, ello en el marco de proceso disciplinario iniciado en su contra. Posteriormente, el grupo parlamentario en pleno deberá tomar una determinación final.
La congresista Úrsula Letona explicó qué sanciones contemplan las normas internas de la bancada. “Es una amonestación, que puede ser el caso; una suspensión temporal, como fue el caso del congresista [Julio] Gagó; o la expulsión de la bancada. Son los tres aspectos que prevé el reglamento”, explicó a la prensa.
Sin embargo, precisó que ello depende de los atenuantes, agravantes, la conducta de Fujimori, si es reiterativo en su accionar o si pide disculpas.
En ese sentido, Letona sostuvo que en la bancada se tiene que actuar de acuerdo a la disciplina. “En Fuerza Popular buscamos trascender más allá del apellido Fujimori. Y en este caso, el congresista Kenji Fujimori es un congresista más y se le va a aplicar el reglamento de acuerdo a lo que corresponde”, sentenció.
Por su parte, el vocero de la bancada, Luis Galarreta, sostuvo que la sanción “puede ser simplemente una amonestación”, pero evitó adelantar más sobre el tema. En tanto, apuntó que Kenji Fujimori no estuvo en la reunión de anoche donde se acordó iniciar un proceso disciplinario en su contra.
—Las razones—
Más temprano, el legislador Héctor Becerril señaló que el inicio del procedo disciplinario se debe al “continuo ataque hacia el Congreso de la República y hacia los congresistas de Fuerza Popular”.
Esto fue secundado por Letona y Galarreta. Ella mencionó que no se trata de temas de fondo, sino de forma. “El nauseabundo, el coliseo, el hablar de animales y de circo creo que no es solamente respecto de una actitud partidaria, es respecto de lo que es el Congreso de la República”, dijo recordando anteriores expresiones de Fujimori vía Twitter.
“Nadie quiere que Kenji deje de opinar. Lo que creemos es que si tiene algo que debatir, alguna posición personal, las haga conocer primero a nosotros para también escuchar nuestros argumentos”, acotó.
A su turno, Galarreta apuntó que el proceso no se debe a discrepancias, sino a que parlamentarios de la bancada se han sentido incómodos por “comentarios, actitudes, o adjetivos”, que pueden ser considerados “desleales”.
