El crecimiento económico de China ha permitido de un gran número de personas pase de la clase media a la alta en algunos años. Es así como se ha vuelto algo común ver a ciudadanos manejando vehículos de lujo a cualquier hora del día.
No obstante, el caso que presentamos a continuación es por lo menos curioso. Un habitante de la ciudad de Zhejiang (al este del país) se apostó en una céntrica calle de dicha localidad para vender bufandas con el objetivo de obtener dinero para pagar el combustible de su Porsche.
Según informa el blog Page Not Found, el joven propietario de este moderno vehículo contó a los medios locales que sus padres le regalaron el auto pero que consideró incorrecto pedirles dinero para el combustible, por lo que decidió vender productos en la calle.
Efectivos de la policía local intervinieron al joven y le reclamaron por su acción. No obstante, se supo que algunas horas después sí obtuvo autorización para vender sus chalinas en otra zona de la ciudad.
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— El Comercio (@elcomercio) octubre 23, 2014
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