:quality(75)/arc-anglerfish-arc2-prod-elcomercio.s3.amazonaws.com/public/E74OOAQE65E7PAE3YJRSXSGCQU.jpg)
:quality(75)/s3.amazonaws.com/arc-authors/elcomercio/5f71beb8-bb6d-4743-9ed2-fc9ea6159daa.jpg "Redacción EC")
Recientemente se ha compartido en YouTube una grabación que ha llevado a muchos a recordar que las torres de electricidad pueden llegar a ser sumamente peligrosas.
El material fue registrado en la localidad californiana de Long Beach, en Estados Unidos, y muestra un par de globos inflados con helio que habían quedado atrapados al borde de una línea de electricidad.
Los globos estaban hechos de tereftalato de polietileno recubierto con una finísima capa de aluminio para metalizar este material sintético. El plástico que recibe este tratamiento es llamado ‘Mylar’ en algunos países angloparlantes.
Justamente la presencia del metal –obviamente, un conductor de la electricidad– es lo que lleva a que, más pronto que tarde, la enorme energía presente en el cableado se manifieste en una potentísima descarga eléctrica.
La explosión resultante desintegra por completo los globos e incluso llega a opacar la luz diurna por una fracción de segundo. La impactante escena fue compartida por el canal de YouTube “ViralHog” y actualmente suma más de 100.000 visualizaciones.
