Una de las principales figuras del último Salón de Nueva York no estuvo precisamente en el stand de alguna marca local, sino que los alemanes de Audi llevaron a la Gran Manzana la segunda generación del R8 Spyder, una verdadera joya en diseño y potencia.
El renovado descapotable de Audi cuenta con mejoras en diseño que siguen la linea ya vista en la versión coupé. Debe su potencia a un poderoso motor V10 de 5,2 litros que genera 540 sorprendentes caballos de potencia.