Tras el terremoto en Nepal, los rescatistas probaron la tecnología desarrollada por la NASA para detectar otros planetas para hallar personas desaparecidas. Dos dispositivos, del tamaño de una mochila, han sido enviados a este país para que sean utilizados en las tareas de rescate.
"La tecnología de la NASA juega muchos papeles: la exploración de la conducción, la protección de las vidas de nuestros astronautas y mejorar - incluso salvar - la vida de las personas en la Tierra", indica David Miller, jefe de tecnología de la NASA en Washington.
El sistema, llamado Finding Individuals for Disaster and Emergency Response - Finder, no necesita que el superviviente esté consciente para encontrarlo, como pasa con sistemas actuales basados en micrófonos.
Finder, basado en microondas de baja potencia, permite detectar movimientos tan sutiles como los de la piel de un desaparecido moviéndose por el latido de su corazón o la respiración.
Las ondas usadas alcanzan una profundidad de hasta 9 metros en montículos de escombros durante la búsqueda, y de 6 metros en caso de un terreno más compacto como el que se crea tras solidificarse el barro o incluso hormigón.
Ese margen de metros para la búsqueda de desaparecidos , según la NASA, puede mejorarse con una calibración personalizada, la cual incluso se está pensando en usar en búsquedas de animales salvajes en reservas o zonas de protección especial.
Los dos equipos utilizados en la zona norte de Kathmandu son prototipos que, de inmediato, han demostrado su utilidad. Gracias a Finder, hace unos días los grupos de búsqueda lograron hallar con vida a cuatro personas bajo las ruinas de dos edificios diferentes.
La NASA aspira a que su tecnología acabe llegando a la calle en equipos asequibles de unos 15.000 dólares.
Fuente: NASA