La National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA) de Estados Unidos ha clasificado al Tesla Model 3 como el vehículo más seguro del mundo en caso de accidentes. Este modelo de automóvil tiene una clasificación de 5 estrellas y ha logrado bajar del 6% las probabilidades de sufrir una lesión. En este ranking se incluyen autos eléctricos, de combustión e híbridos.
La NHTSA pone a prueba a los diferentes vehículos que se venden en Estados Unidos. En esas pruebas, Tesla ha conseguido situar el Model 3 en lo más alto de esta lista junto a otros modelos: Model S y Model X, que ocupan el segundo y tercer lugar de este ranking respectivamente. Es así como la marca californiana lidera el top 3 de los 50 autos más seguros del mercado estadounidense.
Después de las diferentes pruebas de impacto a las que fue sometido, el Model 3 puede jactarse de ser el único vehículo que ha logrado bajar del 6% las probabilidades de lesión en un impacto.
Ser un vehículo eléctrico le ha permitido al Model 3 obtener estos resultados, pues la ausencia de motor de combustión tradicional en la parte frontal, han permitido que tenga una mayor flexibilidad a los ingenieros a la hora de definir las zonas de deformación controlada, para poder absorber la energía del impacto.
Asimismo, se ha destacado la equidad en la distribución de peso en este modelo junto al diseño que le permite ubicar sus componentes más pesados en el centro de gravedad del mismo; así como los demás factores que le han permitido colocarse delante de cualquier otro modelo del mercado en cuanto a la seguridad.
Prueba frontal del Tesla Model 3
Prueba lateral del Tesla Model 3
¿Qué es la NHTSA?
La NHTSA es una agencia dependiente del gobierno de Estados Unidos y forma parte del Departamento de Transporte. Su misión consta en salvar vidas, prevenir heridas y reducir el número de accidentes de vehículos.
Realiza pruebas de seguridad pasiva en autos nuevos entregando una clasificación en estrellas basada en el comportamiento del vehículo en pruebas de choque frontal y lateral. En los últimos años, incorporó una prueba de vuelco ante un accidente, el cual también se mide en estrellas.
La prueba impacto frontal se realiza a 56 km/h contra una barrera fija. Mientras que la de impacto lateral se realiza a 62 km/h contra una barrera móvil.