Puerto Rico, El Nuevo Día/GDA
¿Eres de los que les gusta comer bien en la noche? Un nuevo estudio realizado por la Universidad de Bringham Young (EE.UU.) presenta el por qué sentimos la necesidad de comer “snacks” en las noches.
El estudio, publicado recientemente en el portal Science Daily, utilizó varios MRI para medir cómo el cerebro de las personas responden a imágenes de comidas altas y bajas en calorías en distintos momentos del día.
Los resultados demostraron que las imágenes, especialmente aquellas de alimentos altos en calorías, pueden generar picos de actividad cerebral, pero esas neuro-respuestas son más bajas en la tarde.
“Puede que estés sobre consumiendo alimentos en las noches porque la comida en estas horas no es tan satisfactoria, por lo menos visualmente”, dijo el autor principal del estudio, Travis Masterson. “Al no resultar estimulante, comen más para intentar satisfacer”, añadió.
El análisis también reporta que los participantes reflejaron mayor preocupación por lo que ingerían en la noche aunque sus niveles de hambre y llenura eran similares a los medidos durante el día.
Masterson, quien lideró la investigación, como parte de su tesis de maestría, mencionó que la intención fue identificar si la hora del día influye en las respuestas neurológicas a la comida.
Durante el proceso, los participantes vieron 360 fotos de comida en dos sesiones separadas, una en la mañana y una semana más tarde, otra en la noche.
Los investigadores afirmaron que el estudio es preliminar y requiere trabajos adicionales para entender con más certeza los hallazgos.
El próximo paso es determinar a qué medida estas neuro-respuestas se reflejan en los hábitos alimenticios y las implicaciones en el aumento de peso.
Consciente de cómo funciona su cerebro en las noches, Masterson dice que para evitar comer en exceso se dice a sí mismo “esto no va a ser tan satisfactorio como debe ser”.