La nueva técnica e instrumental patentados por el oftalmólogo peruano Rodolfo Pérez Grossmann prometen un mejor tratamiento del glaucoma. (El Comercio)
La nueva técnica e instrumental patentados por el oftalmólogo peruano Rodolfo Pérez Grossmann prometen un mejor tratamiento del glaucoma. (El Comercio)
Bruno Ortiz Bisso


El es considerado una de las tres principales causas de ceguera en el mundo, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se calcula que en el Perú, un 4% de personas mayores de 40 años la sufren. Se puede frenar, pero hasta ahora es incurable. 

La nueva técnica e instrumental patentados por el oftalmólogo peruano Rodolfo Pérez Grossmann prometen un mejor tratamiento del glaucoma. (El Comercio)
La nueva técnica e instrumental patentados por el oftalmólogo peruano Rodolfo Pérez Grossmann prometen un mejor tratamiento del glaucoma. (El Comercio)


Cuando se presenta el , la presión ocular aumenta lentamente y empieza a lesionar el nervio óptico. En la actualidad existen muchas alternativas para su tratamiento, pero el doctor peruano Rodolfo Pérez Grossmann acaba de lograr patentar en EE.UU. un nuevo instrumental quirúrgico que permitirá operaciones más rápidas y una mejor recuperación para los pacientes.


—LAS NOVEDADES—
Algunos pacientes de en los que el tratamiento con fármacos hipotensores (para disminuir la presión ocular) no funciona, se opta por la trabeculectomía, una cirugía de drenaje. En esta se crea un desfogue del humor acuoso para reducir la presión. Se forma una ampolla en la que el humor acuoso se mezclará con la película lagrimal. 


La técnica desarrollada y patentada por el doctor Pérez Grossmann se denomina trabeculectomía con derivación supracoroidea. La gran diferencia es que el humor acuoso –cuyo exceso causa la presión ocular– es conducido al espacio supracoroideo del globo ocular. “Se hacen cortes muy precisos, unas aletas o ‘flaps’, se crea un túnel y se envía el humor acuoso debajo de la esclerótica del ojo, una zona que tiene menos fibrosis y que permitirá que los efectos de la cirugía por duren más tiempo”, indicó el especialista a El Comercio.


Y para hacer ese conducto de desfogue, el doctor Pérez Grossmann también diseñó una nueva herramienta. “Le llamo el tunelizador. No es una aguja, porque si no el orificio se cerraría. Es una pieza que entra debajo de la conjuntiva y al retirarlo extrae algo de tejido, dejando formado un túnel. Se le coloca algunas sustancias antifribóticas y ya está. A esto se le llama ‘one minute surgery’, porque es rapidísimo. Lo importante es que esta herramienta podrá ser usada para otras intervenciones de glaucoma”, refiere el oftalmólogo, director médico del Instituto de y Catarata de Lima, lugar en donde se desarrolló la técnica y la investigación.


Este proceso de patente en EE.UU. ha demorado unos cuatro años, pero la investigación sobre la efectividad de la nueva técnica y de la herramienta lleva casi una década. “Presentamos los primeros resultados luego de los primeros seis meses de seguimiento. Ahora ya tenemos resultados con seguimiento de cinco años. Todo lo hemos presentado en congresos internacionales de y ha tenido gran aceptación”, recalca. 


Tras la patente, una empresa extranjera ha puesto en marcha el proceso de fabricación del aparato tunelador. Se espera que en corto plazo llegue al país.


DIFICULTADES
Según Pérez Grossmann, la trabeculectomía tradicional falla por temas de cicatrización, cerrando el canal de drenaje, lo cual hace que la presión ocular vuelva a subir. A veces se requiere una nueva cirugía tan solo un año después.


NO TODO ES LÁSER
El experto señala que aunque el láser es una gran herramienta para el tratamiento de , no es eficiente para todos los casos. Asegura que su uso puede causar el aumento en la presión ocular durante la intervención. La recomendación es conversar con un especialista para determinar el tratamiento.

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