(Foto: AFP)
(Foto: AFP)
Diego Suárez Bosleman

Ni por cáncer ni por diabetes, ni siquiera por accidentes de tráfico. En el 2050, las bacterias resistentes a los medicamentos serán la principal causa de muerte en el mundo, con 10 millones de defunciones anuales. Así lo dio a conocer en el 2014 un informe liderado por el economista británico Jim O’Neill.

Para evitar este panorama, unidades de investigación médica en varios países trabajan en el desarrollo de nuevas formas para combatir a estas superbacterias. El Perú, de la mano de la Marina de EE.UU., desempeña un papel primordial en esta batalla global.

—El punto de inicio—

En 1983, la Marina estadounidense inauguró en el país Namru-6, una unidad centrada en la investigación de enfermedades infecciosas, tales como el dengue, el zika, la malaria y la chikunguña. Actualmente, esta unidad tiene una importante tarea: poner las bases para la creación de una vacuna contra la cepa de la malaria ‘P. vivax’, la más extendida en Sudamérica.

“Aquí es donde comienzas la ciencia necesaria para crear la vacuna”, le dijo a El Comercio el vicealmirante Forrest Faison, cirujano general de la Marina de EE.UU. “Perú tendrá un enorme impacto global una vez que la vacuna esté terminada”, agregó.

La malaria es una de las enfermedades más letales que existen. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se ha documentado resistencia a los medicamentos en tres de las cinco especies de parásitos de la malaria: ‘P. falciparum’, ‘P. vivax’ y ‘P. malariae’.

Tras analizar en un ambiente controlado poblaciones de ‘Anopheles darlingi’, el mosquito transmisor de la malaria, los especialistas del Namru-6, junto con expertos de la Marina del Perú e instituciones académicas, han logrado identificar 12 antígenos, moléculas capaces de desencadenar una respuesta inmunitaria en un organismo, lo que las hace esenciales para el desarrollo de una vacuna.

“Una vez que se tengan buenos candidatos [antígenos], se hará la transición con el sector comercial, el cual seguirá con la producción de la futura vacuna contra la malaria”, explicó a este Diario el capitán Guillermo Pimentel, comandante de Namru-6.

Pero esta es solo una parte de la investigación. Gracias a una alianza con la Universidad de Princeton (EE.UU.), Namru-6 trajo al Perú ratones modificados que poseen hígados como los de los humanos, los cuales están ayudando a entender un poco más la infección.

“Con estos roedores hemos podido hacer pruebas con la malaria y ver por primera vez cómo se lleva a cabo el proceso de la enfermedad en el hígado [donde estas bacterias maduran]”, afirmó Pimentel.

—Nuevos soldados—

Pero la malaria no es la única enfermedad resistente, y el proceso de desarrollo de una vacuna varía dependiendo de cada mal. Por eso los expertos del Namru-6 están trabajando también en un tratamiento capaz de matar a las bacterias sin el uso de antibióticos. Consiste en la utilización de bacteriófagos, virus que afectan solo a las bacterias.

Según Pimentel, estos virus no representan una amenaza para el ser humano, y se encuentran usualmente en las aguas más sucias que uno puede encontrar.

(Infografía: Antonio Tarazona)
(Infografía: Antonio Tarazona)

“Los científicos peruanos que tenemos en Iquitos van buscando, identificando y aislando bacteriófagos, con el fin de tener una especie de banco. Luego analizamos cuáles pueden resultar efectivos para inhibir enfermedades bacterianas resistentes”, explicó Pimentel.

El vicealmirante Faison dijo que este tratamiento ya ha sido probado con éxito en un niño en Washington.

“La infección no respondía a ningún antibiótico. Tuvimos el permiso de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés) de utilizar de forma experimental un coctel de bacteriófagos que Namru-6, con apoyo de instituciones académicas peruanas, ayudó a desarrollar. Aunque no estaba listo para una producción masiva, lo utilizamos con éxito en este paciente”, relató el oficial.

Para Faison, este es solo el comienzo, y pronto el impacto del trabajo que se desarrolla en el Perú se verá en todo el mundo.

—La amenaza del zika—

El Namru-6 estudia actualmente la genética y mutaciones del virus del zika.

Los resultados de estos análisis son enviados a EE.UU., donde sirven como base para el desarrollo de una vacuna.

Los expertos del Namru-6 planean iniciar un estudio para identificar animales capaces de albergar el zika, a parte de los mosquitos.

—Más datos—
429.000 personas murieron en el 2015 debido a la malaria, según datos de la OMS.

700.000 decesos se registran cada año por bacterias resistentes a fármacos, según la revisión sobre la resistencia antimicrobiana del 2014.

Contenido sugerido

Contenido GEC