¿Cómo las apps que imitan la fotografía análoga están conquistando las redes?

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Y es que la fiebre por conseguir aquel efecto antiguo, “de rollo”, en las fotos digitales, ha calado cada vez más entre el público especialmente joven. Aplicaciones como Dazzcam, OldRoll y la versión móvil de Lightroom son algunas de las populares herramientas que utilizan los usuarios para dar ese toque retro a sus fotografías. Pero, ¿cómo surge esta afición por el uso de aplicaciones que imitan la fotografía análoga?

El factor clave detrás del uso de estas apps: alcanzar lo ‘aesthetic’

Este fenómeno proviene de una corriente denominada ‘aesthetic’ y está muy asociada a la moda y la nostalgia, de acuerdo con Juan Carlos Beltrán, fotógrafo aficionado y parte del equipo de IgersPerú, la comunidad Instagramer más grande del país.

Traducido al español como ‘estético’, el Diccionario de Cambridge define la palabra como “relativas al disfrute o estudio de la belleza”. Es decir, aquello que resulte agradable ante la vista de las personas, como el arte.

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“Este despertar de esta moda vintage tiene mucho que ver con ello, con toda la visión que hay ahora, este descubrir de los jóvenes que hay por colores y texturas que evocan algo del pasado que son básicamente esos toques de colores analógicos”, comenta Beltrán a El Comercio.

Es así que, en búsqueda de lo ‘aesthetic’, muchos recurrieron al uso de aplicaciones que resultan más baratas y sencillas de usar para obtener el mismo resultado analógico.

“Lo que han hecho estas aplicaciones es recoger esos efectos que anteriormente eran propios de una marca de rollo”, dice Ricardo Choy-Kifox, fotógrafo y docente en la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC). Rollos de la marca Kodak o Fujifilm están ahora inmersos en estas apps. “Puedes encontrar filtros que te dan tus fotos medio magentas, medio verdosas, que le dan un color de foto arruinada en la época del rollo”, agrega.

Y es que no solo han imitado los colores cálidos de Kodak o los tonos verdosos de Fujifilm, sino que también algunos usan los defectos antiguos del rollo y del papel para adaptarlo a modo de filtro. Es decir, lo que antes era considerado un error en las fotografías análogas, ahora ha pasado a ser visto como estético.

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OldRoll es una de ellas y cuenta con más de 5 millones de descargas en la tienda de Google Play ofreciendo 50 cámaras entre gratuitas y de pago. Usarla es una tarea sencilla: basta con seleccionar la cámara, capturar la foto y el filtro se aplicará automáticamente.

Existen otras, como la versión móvil de Lightroom, en las que será necesario que la persona tenga conocimientos básicos en edición para alcanzar el resultado deseado. Esta ha logrado alcanzar más de 100 millones de descargas en la tienda de Google Play.

La fotografía de rollo no se queda atrás

Pese a que la fotografía digital avanza a grandes pasos, la de rollo ha encontrado una forma de resurgir.

A través de un tuit, la marca Kodak reveló estar contratando personal debido a que la demanda de rollos se había “disparado” durante los últimos años. En declaraciones a la web especializada en fotografía Petapixel, el responsable de la división de fotografía de la marca, Nagraj Bokinkere, señaló que durante los últimos 18 meses contrataron “a más de 300 personas en el área de productos químicos y películas”.

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Hay un factor clave que nunca competirá con el uso de estas apps: la experiencia de capturar fotos con una cámara de rollo original. Colocar el rollo, oír el sonido que hace al girar y realizar el primer disparo son momentos que hacen especiales a esta práctica. “La fotografía analógica combina muchas cosas: el feeling, técnica, expertiz, inspiración y toques artísticos”, añade Beltrán.

El experto señala que antes era necesario pensar bien en la composición de la fotografía y “limpiar” el plano, pues la cantidad de disparos era limitada. Ahora, por otro lado, solo basta con editar las fotos en algún programa en caso haya algún error.

Sobre el reemplazo de la fotografía análoga

Para Juan Carlos Beltrán, estas aplicaciones no estarían reemplazando la experiencia de capturar fotos con una cámara análoga, sino abriendo una ventana para quienes estén interesados en esta práctica. “Si tienes acceso a poder retroceder en el tiempo y poder disfrutar una cámara análoga, bueno pues entonces bienvenido”, puntualiza.

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Choy-Kifox, por su parte, cree que las aplicaciones imitan este acabado y que en realidad ha sido la fotografía digital la que ha reemplazado “al 90%” a la fotografía de rollo”.

Para el docente el problema va en otra dirección: “ya casi nadie se preocupa necesariamente por hacer una buena foto”. Y es que en ciertas ocasiones algunos “simplemente toman fotos” que no muchas veces terminan siendo buenas y solo destacan porque se ven bien. “Te quedas mirando un buen rato la foto y te das cuenta que no es buena, o sea la foto original, y que solamente estás admirando el efecto, o sea el resultado”, agrega.