Llegar a un trabajo nuevo puede ser un momento tenso y de muchos nervios para algunas personas. Un ambiente diferente, compañeros que no conoces y rutinas a las que no estás acostumbrada son algunas cosas a las que deberás enfrentarte ese primer día.
Si ese es el caso, ten en cuenta que lo principal es llegar con muchas ganas de hacer las cosas, aprender y hacer nuevos amigos. Estos tips pueden ayudarte a prepararte para esa ocasión.
1. Cuida tu atuendo
La primera impresión es la que cuenta. La noche anterior piensa qué es lo que vas a usar para ir a la oficina incluyendo los accesorios y el maquillaje. La idea es que luzcas profesional pero natural al mismo tiempo. Si es posible pregunta por el código de vestimenta durante las reuniones y entrevistas previas.
2. No tengas miedo de hacer preguntas
Es de esperarse que no sepas todo el primer día de trabajo y no tendrás más remedio que preguntar. Si bien es cierto que no conoces a las otras personas, acercarse a ellos de forma amigable y preguntarles algo puede ser una buena forma de empezar a crear vínculos. No seas tímida pero tampoco seas confianzuda.
3. No busques el lado negativo
Si desde el primer día ya estas “rajando” de la gente o quejándote del trabajo que haces, nunca vas a estar realmente contenta ahí. Es verdad que no todo es color de rosas y es posible que en algún momento surja alguna incomodidad pero la idea es que, si ocurre, sea meses después de tu llegada cuando estás adaptada y preparada para afrontarlas con confianza.
4. Luce amistosa
Una sonrisa es tu mejor carta de presentación al igual que tus buenos modales. Al ser la nueva en el trabajo, es probable que las miradas de todos estén puestas sobre ti y debes tener eso en mente al momento de comportarte.
5. Sé flexible
Llega a tu primer día con una mente abierta pues cabe la posibilidad de que las cosas se manejen de maneras distintas a las que tú estabas acostumbrada en tu nueva oficina. Mantén los ojos y oídos abiertos a las rutinas que hay para que entiendas cómo funciona todo ahí.