Adlai Stevenson en el Perú: la vez que el embajador de EE. UU. fue enviado por Kennedy a visitar los lugares más pobres de Lima
En 1961, el político estadounidense llegó al país como parte de una gira por Latinoamérica. Ya en suelo limeño, el emisario de la ONU se entrevistó con dirigentes de partidos políticos, conoció el Museo Antropológico y visitó algunos barrios humildes de nuestra capital.
Eran las 11 y 35 de la mañana del 16 de junio de 1961, cuando un gigantesco avión cuatrimotor de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos aterrizó en el aeropuerto de Limatambo. La aeronave traía al Perú al embajador del país norteamericano, Adlai Stevenson. El emisario de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) llegaba a nuestro país como parte de una gira por Latinoamérica. Su visita formaba parte del programa “Alianza para el Progreso”, impulsado por el presidente de EE. UU., John F. Kennedy.
Tras varios segundos de espera, un grupo de funcionarios norteamericanos descendió de la nave. Stevenson fue el último en bajar. Vestido con un traje gris y un ligero abrigo, el diplomático agitó las manos y se quitó el sombrero en agradecimiento a los aplausos que recibió del público presente en el terminal aéreo. Luego, fue recibido por el edecán del presidente de la República y varios ministros. En seguida, saludó al embajador de su país en el Perú y conversó amenamente con Víctor Andrés Belaunde, representante peruano en la ONU. Esta sería la segunda vez que el importante político estadounidense llegaba al Perú; ya que, en 1960, hizo una visita no oficial.
Después de saludar a todos los funcionarios, el enviado especial del presidente Kennedy dio un discurso en inglés. Allí expresó “que EE. UU. tenía un gran respeto y admiración por el Perú”, y que esperaba darse “un tiempo para ver el progreso alcanzado en la construcción de viviendas y otras medidas adoptadas para mejorar la condición de vida del pueblo peruano”. Estas palabras fueron traducidas al español por un agregado de prensa de la delegación norteamericana. Finalmente, el diplomático se dirigió, junto a su comitiva, hacia la residencia de la embajada de su país, ubicada en la avenida Arequipa, en el Cercado de Lima.
Arduo programa de actividades
Luego de pasar por la residencia, Adlai Stevenson visitó al presidente Manuel Prado Ugarteche en Palacio de Gobierno. En el lugar, se reunió con el mandatario y los ministros de Hacienda, Relaciones Exteriores, Fomento y Salud Pública. Después, improvisó una amplia entrevista ante la prensa nacional e internacional desde el despacho presidencial. Allí explicó el motivo de la reunión: “Estas conversaciones han sido muy útiles e ilustrativas en conexión con la próxima reunión económica de Montevideo, de acuerdo a los lineamientos del programa “Alianza para el Progreso” del presidente Kennedy”.
La mañana del 17 de junio de 1961, el diplomático estadounidense conversó con el rector de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) en la residencia de la embajada de su país. Luego, recibió a varios políticos locales como Manuel Cisneros Nahuez (personero del Movimiento Democrático Peruano), Fernando Belaunde Terry (líder y fundador de Acción Popular), Héctor Cornejo Chávez (postulante a la presidencia del partido Demócrata Cristiano) y Manuel Odría (candidato de la Unión Nacional Odriísta). En estas reuniones, estuvo hasta la 1 de la tarde.
Horas después, Stevenson ofreció un almuerzo para varias personalidades y funcionarios peruanos. A la comida asistieron, el embajador de Estados Unidos, el representante de la Santa Sede, el presidente del directorio del Banco Popular, el subdirector de El Comercio, el director de la Clínica Americana y los ministros de Hacienda, Relaciones Exteriores, Fomento, Guerra, Marina, Aeronáutica, Salud Pública, Educación y Agricultura. También estuvo presente su comitiva.
Visita a los barrios más pobres de la capital y despedida
Tras terminar la comida, el embajador estadounidense partió en su automóvil rumbo al barrio de San Juan, ubicado en el kilómetro 16 de la Carretera Panamericana Sur. En el lugar, el diplomático fue recibido por el director general de la empresa “Hogares Peruanos S.A.”. El empresario le explicó todas las obras que habían hecho en la zona como parte del proyecto “Alianza para el Progreso”. Horas después, Stevenson se trasladó hasta Ciudad de Dios, ubicada actualmente en San Juan de Miraflores. Allí tuvo una gran bienvenida y recorrió las calles con el párroco de la localidad. Antes de irse, recibió un memorándum en agradecimiento por su visita.
Horas después, el enviado especial del presidente Kennedy visitó el Museo Antropológico del Perú, ubicado en Pueblo Libre. Ahí fue recibido por el director de esa institución. Ambos recorrieron las distintas secciones del museo. Esa noche, Stevenson tuvo una cena en la casa del presidente del Gabinete. De esta manera, cumplió con un nutrido cronograma de actividades de más de 46 horas en nuestro país.
Al día siguiente, el 18 de junio de 1961, Adlai Stevenson partió muy temprano al aeropuerto de Limatambo. A las 8 y 30 de la mañana, el diplomático llegó al terminal aéreo acompañado por el embajador de los Estados Unidos y su esposa, En el lugar, lo recibió el edecán del presidente de la República, el ministro de Salud Pública, el embajador de Colombia, el prefecto de Lima y varios diplomáticos estadounidenses. Luego, agradeció la labor de resguardo que le realizó la Policía de Investigaciones del Perú (PIP). Antes de subir al avión, seis niños norteamericanos le dieron un homenaje de despedida. Es así como dio un breve discurso improvisado, abordó la aeronave de la Fuerza Aérea de EE. UU. y siguió con su gira hacia Ecuador.