Reflexiones tras una paliza de aquellas
Cristal aprovechó que la ‘U’ mostró su peor cara en el partido que debía confirmar su recuperación y le pegó donde más duele. Las ausencias de Gonzales y Gómez no alcanzan para justificar esta vergüenza. Aún con ellos, el partido podía perderse, pero no de esta forma. Comizzo cometió demasiados errores y jugadores como Alloco profundizaron más el desastre.Hay ciertos conceptos que quisiera reiterar en este momento de tristeza e indignación:
1. El castigo a Gonzales y Gómez. La decisión de Comizzo de prescindir de ambos fue acertada. Llegaron a la concentración tarde, de acuerdo con una fuente confiable, no con una hora de retraso, sino con casi tres. Es más, al parecer no era la primera vez que desobedecían al técnico. La disciplina no puede quebrantarse, más aun en muchachos que creen haber conseguido todo cuando no le han ganado a nadie. Traicionaron la confianza del técnico y de sus compañeros.
2. La maldita irregularidad. En medio de la euforia por la goleada ante Melgar, decía en el post anterior que el mayor problema del equipo era su irregularidad. La ‘U’ juega bien un partido y mal otro, al margen del resultado. Ha ganado encuentros jugando mal –contra León- o perdido jugando parcialmente bien –el primer tiempo contra Alianza-; pero no puede mostrar un funcionamiento que le permita adquirir credibilidad como equipo.
3. Más que errores, horrores. Comizzo cometió varias equivocaciones: leyó mal el partido. No supo como desentrañar la marca que le impuso Cristal en el medio y por las bandas. Cuando el partido exigía ingenio y manejo del balón, envió a Fernández por Miguel Torres y la embarró aun más al mandar a la cancha a Ximénez, con el partido ya definido. No soy fan de Guastavino, pero dado que era el único talentoso en la banca, ¿por qué no lo incluyó? Suponer que llenando el equipo de delanteros se va a aumentar la claridad ofensiva es un pensamiento primarioso, de novato. A veces hasta es mejor meter a un contención para recuperar la pelota y manejarla.
4. Equipo corto. Más allá de los problemas en el banco, la ‘U’ no cuenta con un plantel variado, y cualquier cambio provoca remezones. Cristal, Aurich o Vallejo pueden armar hasta dos equipos más o menos equilibrados, algo imposible para la crema.
5 ¿Hubiera sido distinto? Aún con Gonzales y Gómez el partido se habría podido perder; no obstante, sus ausencias se sintieron. Al primero se lo extrañó por su claridad para abrir huecos donde no los hay y al segundo porque, pese a sus vaivenes, brinda salida, desborde y, en ocasiones, disparo de larga distancia. Además, hacer jugar a Chávez con el pie cambiado fue un absurdo gigantesco.
6. Fracasos individuales. Hubo algunos jugadores que estuvieron en una tarde negra (Rainer y Toño, por ejemplo); pero lo de Alloco no tiene nombre. Nervioso, falto de ubicación y recursos, completó una actuación desastrosa. Un periodista amigo decía que no recordaba una actuación decente del argentino con la camiseta crema. Le retruqué que sí había hecho buenos partidos, solo que los hizo frente a clubes de menor fuste que Cristal. Ante un equipo que le demandó una exigencia mayor, simplemente fracasó.
7.¿Debe irse Comizzo? Un 0-4 en contra, y en un clásico, es un resultado ‘sacatécnicos’. Pese a que no es el único culpable de este desastre, espero que al menos haya puesto su cargo a disposición por una cuestión de decencia. Vergüenzas como la del domingo no se olvidan así nomás.
Espero sus comentarios. Un abrazo para todos.
ACTUALIZACIÓN 29-04-13 / 11:05 A.M.
Rocío Chávez confirma que Gómez y Gonzales eran reincidentes. Sus declaraciones pueden leerlas aquí