La memoria de los brasileños los tiene marcados como sus grandes rivales, aquellos que les hicieron pasar malos momentos en los mundiales, y seguro que alguna venganza quisieran tener.
Paolo Rossi y Zidane llegaron al país de la samba para el mundial Brasil 2014 y pese a que ambos marcaron goles en las finales de 1982 y 1998, que dejaron sin títulos al 'Scratch', fueron recibidos de buena forma.
Esto, claro, es parte de un comercial de una conocida marca que auspicia la Copa del Mundo.