Arturo León @arturoleonf
Hitzfeld lo dice seguro y convencido: “Somos más fuertes que el 2010”. Quién no recuerda a Suiza el 2010. Fue la única selección que derrotó a la España campeona del mundo.
Tal hazaña no sirvió de mucho: se fueron eliminados en primera ronda. Pese a eso, Ottmar Hitzfeld, un técnico que ganó casi todo en Alemania, se quedó un ciclo más. Necesitaba demostrar algo: que la mejor selección suiza estaba por verse.
Las Eliminatorias rumbo a Brasil 2014 serían el termómetro del estratega alemán. Los resultados fueron sorprendentes. Invictos, 7 victorias y tres empates. ¿El premio? Cabezas de serie en el Mundial. ¿La fórmula? Hitzfeld consolidó a los jugadores que participaron en Sudáfrica con 24-25 años. Y añadió jóvenes al plantel, algunos campeones mundiales Sub 17 el 2009.
La estructura de Hitzfeld se sostiene básicamente en 5 jugadores: Benaglio, arquero sobrio de 30 años con trayectoria en Alemania. Lichtsteiner, lateral de la Juve, líder dentro y fuera de la cancha, comanda la defensa. Todo equipo tiene un organizador y en Suiza ese es Granit Xhaka. Zurdo, de buen pie, lleva la ‘10’, pone la pausa y los pases.
Arriba: Shaqiri y Seferovic. El del Bayern ya es una mediapunta maduro a pesar de sus 22 años. Mientras que el ‘9’ de la Real Sociedad promete ser la revelación. El equipo europeo candidatea a ser ‘outsider’ en Brasil 2014. Casi nadie habla de ellos. Casi nadie los conoce. Como sucedió en Sudáfrica 2010.