Dortmund (EFE). El Borussia Dortmund arrancó su participación en la Champions League con un importante triunfo por 2-0 sobre el Arsenal, en un choque en el que los germanos se mostraron netamente superiores al conjunto londinense, que nunca tuvo claro a qué debía jugar. Ni las importantes bajas con las que afrontó el duelo el conjunto alemán, que hoy no pudo contar con piezas básica como el central Mats Hummels o el media punta Marco Reus, lesionados, variaron la filosofía de juego de los locales, que buscaron en todo momento la portería rival.
A base de una intensa presión y sobre todo mucha velocidad, el Dortmund no tardó en encerrar en su propio campo a un Arsenal, que pese a contar con un centro del campo ideado para manejar el ritmo del partido, ni tuvo el balón, ni cuando lo tuvo supo qué hacer con él.
Circunstancia que no tardó en propiciar las llegadas del conjunto local, que pese a intentarlo de todas las maneras posibles no tuvo la efectividad necesaria para trasladar al marcador su dominio sobre el terreno de juego.
Un tanteador que el Borussia Dortmund, curiosamente, logró estrenar cuando permitió estirarse mínimamente al Arsenal, que muy errático en la circulación de balón, posibilitó a los veloces contragolpes de los atacantes germanos, que con metros por delante mostraron su mejor versión. Como el italiano Ciro Immobile, que estableció el 1-0 para los locales en el último minuto de la primera mitad, tras una sensacional carrera desde su propio campo, en la que el transalpino a base de fe y de potencia, dejó en evidencia a los zagueros ingleses.
Este gol premiaba la mayor claridad de ideas de un Borussia Dortmund, que sentenció el choque a los tres minutos de la segunda mitad, con un gol (2-0) del gabonés Pierre-Emerick Aubameyang, que volvió a ganar la espalda a la defensa del Arsenal. El propio Aubameyang pudo ampliar todavía más la ventaja de los locales nueve minutos más tarde, en el 57, con un potente remate que se estrelló en el larguero de la portería defendida por Wojciech Szczesny.
Ejemplo del desconcierto de un Arsenal, que pese que intentó variar el rumbo del partido con la salida a los 62 minutos de Alex Oxlade-Chamberlain y el español Santi Cazorla, que suplieron a unos grises Aaron Ramsey y Mesut Özil, siempre estuvo a expensas de su rival. Un Dortmund que con esta victoria se postula como un serio candidato a la primera plaza de un grupo B, que completan Anderlecht y Galatasaray, ante un confuso Arsenal, en el que la única buena noticia fue el debut del joven defensa español Héctor Bellerín.
