Barcelona (EFE).- El entrenador del Barcelona, Luis Enrique Martínez, ha afirmado que la victoria por la mínima ante el APOEL de Nicosia (1-0) por la Champions League es un ejemplo "de que va a ser una temporada muy complicada", si bien se ha mostrado satisfecho con la actitud de sus jugadores.
El técnico asturiano ha admitido, en la rueda de prensa tras la victoria de su equipo, que a su equipo le ha faltado algo de claridad en la circulación y puntería en ataque ante un rival defensivo que les ha puesto en apuros.
"Lo que más me ha gustado ha sido el resultado, la actitud de los jugadores y el apoyo del público. En las últimas semanas, hice una llamada de nuestra afición para que nos ayudaran cuando las cosas no funcionaran. Hoy ha sucedido. Esto es el ejemplo de que va a ser una temporada complicadísima, pero estoy contentísimo", ha asegurado.
Ha destacado Luis Enrique haber debutado con victoria en Europa, más aún después del empate entre el Ajax de Amsterdam y el Paris Saint-Germain en el otro duelo del grupo (1-1).
"Atacar a un equipo con estas circunstancias nunca va a ser fácil. Saco cosas positivas, como el gol a balón parado, y por la presión en recuperar el balón tras pérdida", ha enfatizado el técnico azulgrana, quien ha destacado, de nuevo, la solidez defensiva de su plantilla.
"Atacar de una manera ordenada te permite condicionar al rival. Está muy bien no encajar gol, pero también estaría contento si hubiésemos ganado habiendo recibido algún gol", ha añadido.
Luis Enrique ha añadido nueve cambios en la alineación de hoy en comparación con el último partido ante el Athletic Club. Entre ellas ha destacado la entrada del guardameta Marc-André Ter Stegen por el chileno Claudio Bravo.
En este sentido se ha mostrado favorable a realizar rotaciones con los porteros: "No creo en los tópicos de que un portero tenga que jugar para toda la temporada. Quiero a todos los jugadores listos para competir. Con veinticinco jugadores vamos a ser más fuertes que trece".
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