Messi, Neymar, Cristiano e Iniesta. Sudamérica y Europa enfrentadas por siempre en la historia de las copas del mundo. América con 9 títulos, el Viejo Continente con 10. Pasan los años, los jugadores y la sensación parece la misma: Sudamérica y Europa se reparten el mayor talento futbolístico del planeta. Allí crece y se conserva. Allí está el secreto. Allí estará por los siglos de siglos.
Siempre fue así, desde los tiempos de Beckenbauer y Di Stéfano, desde la época de Pelé y Cruyff, y cuando fueron campeones Maradona y Matthaeus. Hoy es igual: Messi, Neymar, Cristiano Ronaldo y Andrés Iniesta –también Franck Ribéry, habría que incluirlo en este lote– llegan al Mundial de Brasil con una hoja de vida pesada y gloriosa. En millones y títulos. Se trata del mejor jugador FIFA 2012 –Leo–, el mejor jugador de la última Copa Confederaciones, el ‘minimundial’ –Neymar–, el gran candidato a ganar el Balón de Oro 2013 –Ronaldo– y el líder del último campeón del mundo –Iniesta–. Millones de dólares y toneladas de calidad. Genios y figuras. Amigos y rivales. Todos cracks.
A cuatro meses del inicio de la copa, pactado para el 12 de junio en el estadio Arena de Sao Paulo –la nueva cancha del Corinthians de Paolo Guerrero–, DT El Comercio presenta una primera reseña estadística sobre las 32 selecciones participantes. La vista panorámica tiene en Argentina, Brasil, España, Alemania y Holanda a los candidatos naturales para el título. Y a Messi, Neymar, Cristiano e Iniesta como héroes que, por sí solos, podrían iniciar la gesta de sacar campeones a sus equipos.
Había una vez, hace cuatro años, en que los hinchas del fútbol volvieron a ser niños en una cancha o frente a la pantalla del televisor. Contemos las horas para volver a ver esta película, este cuento increíble de la vida real que es la Copa del Mundo.