Redacción EC
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Pólvora y visión de juego para regresar a la buena senda. El colombiano se reincorpora al y su técnico, Carlo Ancelotti, se frota las manos, pues recupera a uno de sus mejores asistentes y a su cuarto máximo goleador para el tramo final de la temporada.

A la espera de que los médicos certifiquen su alta médica definitiva, James Rodríguez parece listo para volver a formar en el once que el entrenador italiano dispondrá el domingo en la Liga BBVA ante el Granada. 

Y aunque es probable que, tras dos meses parado por lesión, Ancelotti no cuente de entrada con el centrocampista colombiano James Rodríguez, tenerlo de nuevo a su disposición en el banco amplía su abanico de posibilidades y refuerza las bazas del Real Madrid. 

Hasta que se lesionó a inicios de febrero frente al Sevilla, James se había revelado como el mejor debutante de la Liga española con sus ocho tantos y sus siete asistencias de gol.

Su ausencia, sin embargo, fue aprovechada por el uruguayo Luis Suárez y por el croata Mario Mandzukic para tomarle la delantera en esa carrera. Suárez suma ahora ocho dianas y nueve asistencias con el Barcelona, mientras que Mandzukic firmó 12 goles y cinco pases decisivos para el Atlético de Madrid.

Y es que la fractura en el quinto metatarsiano del pie derecho le llegó a la joven estrella colombiana justo en el momento en que su adaptación a la posición de volante ofrecía el mejor rendimiento.


James Rodríguez había encontrado su sitio entre la constelación de estrellas del Real Madrid tras un estreno titubeante con la camiseta blanca y después de que Ancelotti pidiera tiempo y paciencia con el joven de 23 años.

"Tiene que acostumbrarse a jugar un poquito más atrás. Pero no le falta nada. Para él ha cambiado el equipo, los compañeros y el entrenador. Y tiene que adaptarse", señaló Ancelotti después del millonario traspaso de James desde el Mónaco (80 millones de euros), que siguió a su gran actuación en el Mundial de Brasil.

La presencia del portugués Cristiano Ronaldo, del francés Karim Benzema y del galés Gareth Bale en la delantera blanca obligaba al colombiano a retrasar su habitual posición y a priorizar su capacidad asistente por delante de la goleadora, en las botas de la denominada "BBC" (Benzema, Bale, Cristiano).

James lo logró con el paso de los partidos y sin renunciar a marcar. Hasta que lesionó, sumó 12 goles y 10 asistencias en todas las competiciones, números que lo convirtieron en un fijo en el once de Ancelotti. El italiano, además, encontró en él un excelente refuerzo para el mediocampo.

Pegado a la banda como el español Isco, la presencia de James permitiría al técnico del Real Madrid aumentar el poderío ofensivo del equipo y dejar la medular a los mandos del alemán Toni Kroos, acompañado ahora del recién recuperado Luka Modric.

La reincorporación de James, no obstante, obliga a Ancelotti a revisar su cuestionado 4-3-3, un dibujo al que el técnico italiano se ha mostrado muy reacio a modificar pese a las críticas y a los fluctuantes resultados.

El Real Madrid lideraba el campeonato español cuando la estrella colombiana se lesionó. En su vuelta, el equipo blanco persigue al Barcelona, que le aventaja en cuatro puntos tras ganarle el último clásico.

En los dos meses de ausencia del colombiano, que coincidió con la de Sergio Ramos, la del portugués Pepe en algunas fases y la de Modric, el Real Madrid perdió tantos partidos como ganó -cuatro- y cedió el liderato.

En la cancha del Granada, en la primera fase del campeonato, James firmó un doblete con un golazo de volea que figura entre los mejores de su cuenta. El domingo, ante el mismo rival, la estrella colombiana espera pisar de nuevo el césped del Santiago Bernabéu y dar de nuevo gas al Real Madrid. 

FUENTE: DPA

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