Gareth Bale es a lado de Ronaldo uno de los delanteros más peligrosos del Real Madrid. Cuando el galés acelera es muy difícil detenerlo y hasta el mismo tiene problemas como lo hizo hoy en el partido ante el Rayo Vallecano.
Corría el minuto 36. Bale tomó el balón, tenía una marca que no le molestaba y no podía alcanzarlo, por lo que levantó la cabeza la cabeza al portero Rubén y definió.
Lamentablemente para los hinchas merengues, Bale pateó el césped, se cayó y falló una oportunidad de gol del Madrid. Previamente Ronaldo había adelantado a los merengues a los 14 minutos del primer tiempo.