Justo antes de salir a la cancha, cuando solo se alistaban para darse el último aliento, los jugadores de River Plate atravesaron un pequeño pasadizo en su vestuario en el estadio “La Bombonera”, y se dieron de frente con una gran pantalla de televisor que mostraba un video preparado especialmente para ellos.
Uno a uno se fueron abrazando sin despegar la mirada de aquel video motivacional que les recordaba que en esa lucha, en aquel clásico ante Boca Juniors, por primera vez “once hinchas de River” iban a “estar solos”. Sin el apoyo de su hinchada desde la tribuna debido a extremas medidas de seguridad impuestas en el fútbol argentino.
Tras dos minutos de atención el silencio absoluto del plantel estalló en arengas y vivas entre los propios jugadores. 94 minutos después, River Plate ganó 2-1 en la cancha de Boca un clásico que ya quedó grabado en la historia.