La mexicana Ana Lago representó como ninguna otra el objetivo de la primera reunión de las Superestrellas de la Gimnasia que se llevó a cabo el fin de semana de Londres.
Y es que el ejercicio de suelo de la gimnasta de Monterrey ha seguido dando que hablar en la capital británica y en las redes sociales al sorprender por su atuendo y coreografía.
Lago salió a ejecutar su rutina libre en el The Superstars of Gymnastics con un atuendo de mariachi y solo hicieron falta los primeros compases de la canción "Un Poco Loco" de la película "Coco" para cautivar al público presente.
La actuación de la medallista de oro de los Juegos Panamericanos de 2011 hizo recordar la "rutina perfecta" de Katelyn Ohashi en enero de este año que se hizo viral en las redes sociales.
Al igual que la gimnasta estadounidense, Lago se mostró distendida durante su ejecución, completando con una sonrisa cada uno de sus movimientos al tiempo que la gente disfrutaba de lo que veía.
Eso mismo ocurrió con los ejercicios de los otros participantes del evento que contó con reconocidos gimnastas de todo el mundo, entre los que también se encontraron la chilena Simona Castro y la argentina Ayelen Tarabini.
¿Un cambio?
Dada la repercusión que tuvieron actuaciones como la de Lago y la presencia de los campeones mundiales y olímpicos en el evento, como la estadounidense Simone Biles y el británico Max Whitlock, pareciera que hay espacio para una nueva forma de concebir el tradicional deporte.
Objetivo que se trazaron los organizadores de las Superestrellas de la Gimnasia de acercarlo más a la gente.
"Eventos como este es lo que la gimnasia venía necesitando por mucho tiempo", comentó Whitlock, quien fue uno de los jueces junto a Biles, el entrenador de la gimnasta estadounidense Laurent landi y la medallista de bronce olímpica británica, Amy Tinkler.
Hubo también movimientos del popular juego Fortnite y hasta un botón dorado para duplicar los puntos de un ejercicio, lo que para los defensores de la gimnasia tradicional desvirtúa lo que ha sido el deporte hasta ahora.
Pero no se descarta que en futuro surja un consenso en un lugar en el medio entre ambos extremos.
"La gimnasia no tiene problemas de atraer nuevos participantes", explicó Craig Heap, medallista de oro en los juegos de la Mancomunidad Británica y quien participó en las Olimpiadas de Sídney 2000.
"Hay una lista de espera de 1,2 millones de personas tratando de ingresar a los clubes en Reino Unido solamente".
"Pero tal vez haya algo que se necesita cambiar", reconoció.