Perú y el plan Bolivia: ¿Cómo nos fue en Eliminatorias pasadas?

Hace veinte años, Juan Carlos Oblitas decidió junto a su comando técnico trabajar durante diez días en el Cusco antes de jugar el partido de Eliminatorias ante Bolivia. Con la recordada “sopa de cóndor”(dieta para la altura) y con exigentes trabajos físicos en la Ciudad Imperial, la Blanquirroja tuvo uno de sus momentos picos en esa Eliminatoria para Francia 98 y logró arrancar un+ empate en La Paz. A partir de allí se elevaron los rendimientos, se renovó la confianza y empezaron a llegar los resultados que nos dejaron cerca de un mundial y eliminados solo por diferencia de goles. Oblitas no lo olvida y hoy como director de la federación aprueba y saluda que Ricardo Gareca haya elegido la aclimatación cusqueña para el próximo encuentro de las Eliminatorias mundialistas ante el once altiplánico, el próximo 1 de setiembre en el Hernando Siles.

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“Aún faltan definir muchas cosas, pero lo concreto es que el equipo viajará a Cusco el 22 de agosto”, explicó Oblitas. En esta semana han viajado hacia esta ciudad Antonio García Pye, gerente de selecciones, junto a Néstor Bonillo, preparador físico del cuadro blanquirrojo. Lo primero que se han revisado son las instalaciones del club Real Garcilaso en la localidad cusqueña de Oropesa. En este campo que inicialmente había sido donado al club Cienciano (año 2008), el cuadro celeste ha instalado cuatro campos de juego donde la selección entrenaría antes de visitar al equipo boliviano. “De momento hemos quedado en que haremos parte de los trabajos en esa sede institucional. Inicialmente pensamos en el estadio Garcilaso de la Vega, pero esta opción en Oropesa es muy buena”, explicó García Pye.

—La convocatoria—

¿Ricardo Gareca tiene pensado armar dos equipos con un once de altura para La Paz y otro del llano para recibir a Ecuador en el Estadio Nacional? La respuesta por ahora es negativa. El ‘Tigre’ quiere jugar con su mejor once ambos cotejos, por eso tratará de tener a la mayoría del plantel para los diez días de aclimatación en el Cusco. Es cierto que es difícil contar con los jugadores del extranjero con tanta anticipación; sin embargo, esto no sería problema porque Gareca habría decidido que para la próxima fecha doble de Eliminatorias se mantenga la base del equipo que disputó la Copa América Centenario.

La meta es concretar diez jornadas de entrenamiento en el Cusco con un partido de práctica a puertas cerradas con un club local en medio de esos días (Cienciano o Garcilaso). Los seleccionados pasarán pruebas físicas y médicas antes del viaje para determinar si todos pueden viajar al Cusco. En el caso de los ‘foráneos’, el cuerpo médico de la selección y el preparador físico definirán si es más convenientes que viajen desde Lima a La Paz o si pueden sumarse al plantel que estará en el Cusco.

En la libreta de Gareca ya hay nombres en la lista para convocar. El técnico argentino ha tenido reuniones con Juan Reynoso (Melgar)y Wilmar Valencia (Garcilaso) en los últimos días. La fiebre de la Copa América ha terminado. Es momento de volver a las Eliminatorias y ante Bolivia encontrar La Paz.

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