(Foto: AFP)
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Agencia Bloomberg

El gobierno de solicitará la autorización del Congreso para emitir bonos globales después que los legisladores aprueben nuevas leyes tributarias este año, dijo la ministra de Hacienda, Rocío Aguilar.

El Congreso debería aprobar el proyecto de reforma fiscal antes de setiembre, lo que permitiría al gobierno frenar el creciente déficit presupuestario, dijo Aguilar en una entrevista en San José. El proyecto de ley y las nuevas medidas de austeridad podrían restar cuatro puntos porcentuales del déficit para el 2022, agregó.

"Lo que estamos pensando es una autorización global que cubra varios años", dijo Aguilar. "Si continuamos usando solo el mercado local, seguiremos presionando las tasas de interés locales".

El gobierno pretende vender alrededor de US$1.000 millones en bonos al año por cuatro años, dijo la ministra, financiando un déficit fiscal que aumentó al 6,2 por ciento del producto interno bruto el año pasado, el más alto desde al menos 1983. El banco central proyecta que si no se implementan reformas el déficit alcanzaría 7,1 por ciento del PIB este año y 7,9 por ciento en 2019.

La calificación del país ha sido rebajada cuatro veces en los últimos cinco años por las principales agencias calificadoras de riesgo, y el Fondo Monetario Internacional dijo que el déficit coloca a la deuda del gobierno en "una senda insostenible".

"Volveremos a los mercados internacionales", dijo Aguilar.

Costa Rica emitió bonos globales por última vez en 2015, la última porción de un paquete aprobado en 2012 que le permitió al gobierno emitir US$1.000 millones al año durante cuatro años.

Las reformas tributarias, que incluyen convertir el impuesto a las ventas en un impuesto al valor agregado y ampliar su base, y una regla fiscal que limite el endeudamiento, mantendrán los niveles de la relación deuda/PIB en alrededor del 60 por ciento, frente al 70 por ciento sin reformas, dijo Aguilar. El gobierno apuntará a una regla fiscal constitucional que establezca límites de endeudamiento para el próximo año, agregó.

"En el momento en que aprobemos el proyecto de ley, el panorama va a ser muy diferente", señaló Aguilar. "Tenemos un problema fiscal, pero aún somos una buena apuesta para los inversores".

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