Mientras que el primer período del gobierno de Alan García Pérez espantó las inversiones y a las grandes empresas extrajeras de ‘retail’, su segundo mandato (2006-2011) las atrajo.
La mayor estabilidad económica de la época, la baja penetración de los centros comerciales y la buena aceptación de los mismos por parte de los consumidores despertó aún más el interés por esta industria, especialmente a partir del 2007.
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Para entonces ya operaban: Plaza San Miguel (Pontificia Universidad Católica del Perú, PUCP), el Jockey Plaza Shopping Center (Altas Cumbres), Larcomar (antes en manos de Graña y Montero) Open Plaza (Falabella) y Megaplaza Norte (grupo Wiese), Real Plaza (Intercorp), Plaza del Sol ( grupo Romero), El Quinde Shopping Plaza (Ekimed) y Mall Aventura Plaza [sociedad entre los grupos Falabella y Ripley que, posteriormente, deciden romper] hacía su ingreso, entre los principales.
Todos estos grupos, sin duda, vieron en el ‘real estate’ una gran oportunidad de crecimiento en el mercado peruano. No en vano, empezaron a pisar un poco más el acelerador.
Así, progresivamente, entre dos y tres ‘malls’ que se inauguraban en el 2007 se pasó a abrir siete de golpe en el 2008, escalando de 22 a 29 centros comerciales, según la Asociación de Centros comerciales del Perú.
HACIA LA PERIFERIA Y PROVINCIAS
Poco a poco, estos grandes formatos fueron colonizando distritos fuera de la Lima tradicional y moderna e, incluso, ciudades de provincia, con buenas proyecciones de éxito y de retorno de inversión.
Llegó el primer ‘mall’ al Callao (Bellavista) de la mano de Mall Aventura Plaza (ahora Mallplaza) y el primer ‘power center’ con Open Plaza. En tanto, la cadena Real Plaza continúo creciendo en provincias (Huancayo) y en la periferia de Lima.
Ya en el 2009, la competencia empezó a florecer en Lima norte. Megaplaza -que había estado en el distrito de Independencia, solo, prácticamente, por siete años- tuvo que darle la bienvenida a su nuevo vecino: Plaza Norte, el primer centro comercial de la familia Wong. De esta manera, Erasmo Wong entró nuevamente al mundo de los centros comerciales, tras casi dos años (2007) de haber vendido Plaza Lima Sur y sus cadenas de supermercados Wong y Metro a la compañía chilena Cencosud, hecho que fue cuestionado en su momento.
Los Wiese, por su parte -de la mano de su entonces socio Parque Arauco- desarrollaron un formato de centros comercial más vecinal ‘Megaplaza Express’ con el que empezaron a crecer también en zonas alejadas a la Lima moderna, recuerda Karen Lozada, CEO de On Retail Consulting Perú.
MOVIDAS PARA CRECER
Parque Arauco -compañía chilena con mucho kilometraje en el desarrollo, operación y administración de centros comerciales en el vecino país del sur- no contenta con su participación en la cadena Megaplaza siguió buscando nuevas alternativas de inversión. La firma, que anunciaba en el 2010 que estimaba invertir más US$100 millones en varios proyectos en Perú, dio la sorpresa al adquirir el 82,5% de las acciones del centro comercial Larcomar, ubicado en Miraflores, en una operación de US$36 millones. Para concretar la adquisición, Parque Arauco llegó a un acuerdo con la constructora Graña y Montero (G&M).
Su compatriota Cencosud es otro que no se quedó atrás, en este mismo año (2010) decidió apostar por provincias, inaugurando su primer centro comercial -de manera orgánica- en Arequipa ‘Parque Lambramani’. Mall Aventura Plaza también se asentó en Arequipa al igual que Real Plaza. La Ciudad Blanca pasó de no tener ningún ‘mall’ a tener tres en un lapso de poco más de un año.
LA CÚSPIDE
El 2010, definitivamente, fue el precedente de la época dorada de la inversión en centros comerciales, la cual duró cinco años a juzgar por Eduardo Herrera, ex gerente general de Parque Arauco y socio de la gestora inmobiliaria 7GI. Recuerda que, entre el 2011 y el 2015, todas las grandes corporaciones estuvieron muy activas, y que estas hasta llegaron a desembolsar en un año US$750 millones, aproximadamente. Este momento también coincidió con el ingreso de gigantes como Zara –la primera cadena ‘fast fashion’ en aterrizar en el mercado peruano (que desde el 2005 estudiaba su ingreso)- y de la sueca H&M, precisa Karen Lozada.
Solo en este periodo se inauguraron 36 centros comerciales, siendo el 2013 el pico de la expansión. En este último año se abrieron un total de 12 ‘malls’, es decir uno por mes, algo nunca antes visto y que, a hasta la fecha, no se ha vuelto a repetir.
De esta manera, el número de centros comerciales en el país se duplicó. De 36 centros comerciales en 2010 esta industria pasó a 72 en el 2015; mientras que, en términos de facturación esta dio un salto de S/8.985 millones a S/22.879, casi tres veces más.
Real Plaza; Megaplaza con su formato express; Open Plaza, Mall Aventura Plaza, el grupo Brescia con La Rambla y Parque Arauco –que adquirió en el 2014 a Ekimed- fueron sin duda los operadores más agresivos y, claramente, los que más sembraron e impulsaron el desarrollo de esta industria.