A medida que avanzamos en 2024, identificamos mayores oportunidades para el desarrollo de la inversión privada y para las compañías peruanas.
Por un lado, el mercado internacional experimenta una abundancia de liquidez sin precedentes. Evidencia de ello son los niveles de emisión de deuda privada, que con volúmenes superiores a los US$150 mil millones, han tenido el comienzo de enero más fuerte de los últimos 30 años. La lógica es conocida: ante la expectativa de que las tasas de interés bajen, los inversionistas buscan mejores rendimientos y encuentran, a cambio, corporaciones y emisores soberanos que han retrasado sus emisiones en los últimos trimestres, esperando esta oportunidad.
Este contexto internacional encuentra en el Perú un país que se compara muy favorablemente con sus pares regionales, gracias a su fortaleza macroeconómica, estabilidad institucional y respeto al marco legal. Hemos identificado esfuerzos para fomentar la inversión, tanto a nivel público como privado, principalmente en minería, infraestructura, tecnología y energías renovables, que son evidencia del potencial de crecimiento.
No hay duda de que el 2024 puede representar un punto de inflexión importante en los datos de confianza y apetito de riesgo para los empresarios peruanos. Las oportunidades que generan proyectos como la construcción del Megapuerto de Chancay y la ampliación del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, que incrementan el atractivo del Perú como puerta de entrada del comercio internacional a Sudamérica, requieren el desarrollo de un ecosistema alrededor de las cadenas productivas involucradas. También resaltamos la importancia estratégica de APEC 2024, que se realizará en el país, presentándose como una plataforma para atraer la atención de la comunidad internacional, fomentando alianzas estratégicas y brindando oportunidades para nuevos negocios.
Aún así, debemos tener cautela ante una posible volatilidad introducida por eventos políticos. Este 2024 tendrá la agenda electoral más intensa de los últimos 20 años. Además de las elecciones en Estados Unidos, otros 15 países emergentes llevarán a cabo sus procesos electorales, generando potenciales riesgos que deben ser monitoreados. Un nuevo año siempre genera expectativas que, sumadas al contexto internacional, nos permiten avizorar grandes oportunidades como país y sociedad. Sumemos esfuerzos para fortalecer nuestra competitividad y contribuir con el crecimiento sostenible del Perú.