La mayoría de los precios de los metales industriales subían el martes, entre ellos el cobre, debido a que los inversores que apostaron por un largo período de bajas tasas de interés compraban activos más riesgosos, impulsando a las bolsas mundiales y arrastrando al dólar a su nivel más débil desde febrero.
Así, a las 10:42 (GMT), el cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) subía un 0.9% a US$ 10,462 la tonelada, cerca del máximo histórico de la semana pasada de US$ 10,747.50.
En tanto, el Consejo Internacional del Cobre Forjado (IWCC, por su sigla en inglés), informó que la demanda mundial de cobre aumentará un 3.3% en 2022, lo que conducirá a un mercado mayormente equilibrado tras el déficit que se calcula en medio millón de toneladas para este año.
El zinc de la LME ganaba un 2.3% a US$ 3,084.50 la tonelada después de trepar a US$ 3,108.50, su nivel más alto desde junio de 2018.
El dólar más débil ayuda a los metales cotizados en dólares al hacerlos más baratos para los tenedores de otras divisas.
En segundo plano, acecha la preocupación de que los productores de Perú y Chile aumenten los impuestos a las empresas mineras, lo que podría reducir la oferta, dijo el analista de Commerzbank Daniel Briesemann.
Pero Briesemann apuntó que los precios de los metales industriales se habían excedido y probablemente bajarían en la segunda mitad del año, con un descenso en torno a US$ 2,600- US$ 2,700 dólares para el zinc.
El presidente de la Reserva Federal de Dallas, Robert Kaplan, reiteró que no espera que las tasas de interés de Estados Unidos aumenten hasta el próximo año.