Los precios del oro alcanzaron este jueves un máximo de un mes, ya que el dólar y los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidenses bajaban, mientras que los inversores evaluaban cómo los fuertes datos de inflación podrían dar forma a la política monetaria.
El oro al contado subía un 0,4% a US$1.799,30 la onza a las 1100 GMT, tras haber alcanzado su máximo desde el 15 de septiembre de US$1.799,95. En tanto, los futuros del oro en Estados Unidos ganaban un 0,4% a US$1.801,30.
El dólar y los rendimientos de los bonos de referencia del Tesoro estadounidense a 10 años bajaban. Un dólar más débil hace que el oro sea más barato para los tenedores de otras monedas.
El analista independiente Ross Norman describió el repunte del oro como “constructivo”, pero dijo que tenía que superar la resistencia técnica clave en torno a los US$1.800 y los US$1.835, antes de otro movimiento sustancial al alza.
Los inversores tomaron nota de los datos que mostraban que los precios de producción chinos registraron un aumento anual récord el mes pasado y que los precios de consumo en Estados Unidos subieron con fuerza, lo que también avivó el temor de que los bancos centrales pudieran retirar su apoyo económico y subir las tasas de interés antes.
Los banqueros centrales de Estados Unidos señalaron que podrían empezar a reducir a mediados de noviembre el apoyo que dieron a la economía durante la crisis, pero siguen divididos sobre el grado de amenaza que supone la inflación y la rapidez con la que podrían tener que subir las tasas de interés, según las actas de la última reunión de política monetaria.
Pero “ahora que tenemos un poco de visibilidad sobre lo que la Reserva Federal tiene la intención de hacer en términos de reducción y es una cantidad relativamente pequeña, eso ha sido positivo para el oro”, dijo Norman.
Entre otros metales, la plata al contado subía un 1,3% a 23,36 dólares la onza, el platino ganaba un 1,5% a 1.035,47 dólares y el paladio sumaba un 3,5% a 2.178,89 dólares