Bloomberg.- Electrolux sufrió su mayor caída en más de cuatro años después que General Electric abandonase los planes para vender su unidad de electrodomésticos al fabricante sueco por cerca de US$3.300 millones debido a la oposición de los entes antimonopolio de Estados Unidos.
“El peor resultado posible se hizo realidad”, escribieron analistas de DNB Bank ASA, entre ellos Christer Magnergard, en una nota publicada este lunes. “Electrolux ya no puede buscar la que habría sido la transacción más grande de su historia, una pérdida importante para la empresa”.
Electrolux necesitaba la transacción con General Electric para aumentar su escala en el fundamental mercado estadounidense y había decidido acudir a la Justicia para disputar las afirmaciones del Departamento de Justicia de Estados Unidos de que la empresa fusionada y su rival Whirlpool Corp. tendrían un dominio excesivo del mercado de electrodomésticos de cocina del país. La transacción fue anunciada por primera vez en septiembre de 2014 y un juez comenzó a oír argumentos de ambas partes en un juicio iniciado el mes pasado en Washington.
Las acciones de Electrolux llegaron a caer 15 por ciento, el retroceso más grande desde el 19 de julio de 2011, y operaban con una baja del 11 por ciento, a 212,30 coronas, a las 12:26 en Estocolmo.
“Estamos decepcionados y lamentamos que General Electric haya tomado esa decisión”, dijo el máximo responsable ejecutivo de Electrolux, Keith McLoughlin, en una llamada en conferencia. “Ambas empresas trabajaron duro para lograrlo. Las dos sabíamos que sería difícil. Estamos decepcionados, pero sin dudas no derrotados”.
COSTOS RELACIONADOS
Electrolux dijo que se incurrió en costos relacionados a la transacción por 402 millones de coronas suecas (US$47 millones) en los primeros nueve meses del año, según un comunicado. En el cuarto trimestre, los costos de transacción e integración serían de unos 175 millones de coronas y los resultados de aquel período también se verían afectados por costos de cerca de 225 millones de coronas por una línea de crédito a corto plazo.
En el juicio, Electrolux sostuvo que podría mantener los costos bajos y vender hornos y otros productos a precios más bajos a los consumidores. McLoughlin testificó que la adquisición era “vital” para la competitividad de la empresa en el futuro. Por su parte, el gobierno dijo que la empresa resultante de la fusión entre Electrolux-General Electric y Whirlpool tendrían un 88 por ciento de los hornos vendidos en Estados Unidos, un porcentaje inaceptablemente alto.
‘MALA' PARA LOS CONSUMIDORES
“Esa transacción era mala para los millones de consumidores que compran electrodomésticos de cocina todos los años” dijo el Departamento de Justicia en un comunicado después que se cayera el acuerdo. “Electrolux y General Electric no pudieron superar esa realidad ante la corte”.
Ahora Electrolux debería buscar empresas conjuntas en China, si bien “debería tomarse un par de meses para digerir esta derrota”, escribieron los analistas de DNB en la nota. Ellos estiman que los costos relacionados al acuerdo frustrado ascienden a 6,6 coronas por acción.
General Electric buscará un comprador alternativo para su división de electrodomésticos, que está “teniendo un buen rendimiento”, dijo la empresa con sede en Fairfield, Connecticut, en un comunicado.