Congreso aprueba ley que facilita la donación de alimentos - 1
Congreso aprueba ley que facilita la donación de alimentos - 1

“Cuando una empresa quiere donar dinero, lo primero que se tiene que llenar es el formato de lavado de activos”, asegura Aldo Valencia, director de Desarrollo y Marca de Enseña Perú. Esta es solo una muestra de lo difícil, engorroso y hasta sospechoso que puede ser para las empresas realizar cualquier tipo de donación. 

Si bien Valencia resalta que se trata de una falta de cultura en inversión social, reconoce también los bloqueos legales existentes para las donaciones en el Perú. 

“Siempre estamos considerando los riesgos de recibir una donación y de que la Sunat piense que será mal utilizada. La legislación está orientada a prevenir que haya casos de malversación de fondos. Si bien eso es correcto, se deberían mejorar los mecanismos de fiscalización para poder flexibilizarla”, explica. 

TOPE FISCAL
Cualquier tipo de donación, detalla el abogado tributarista José Verona, director del Grupo Verona, está afecto al tope del 10% de la renta neta. Para él, es algo razonable, pues las empresas y la Sunat deben comenzar a madurar los mecanismos de donación. 

“Con el 72% de informalidad existente en nuestro país, este podría ser un camino para realizar actividades que linden con la evasión tributaria. Si no se hubiera puesto tope, podríamos tener cantidades excesivas que se manden al gasto vía donaciones”, resaltó.
De ser así, continuó, habría menos pagos de impuestos en el marco de la situación actual, en la que ya experimentamos dificultades en la caja fiscal.

“En el sistema tributario estamos acostumbrados a que determinados gastos especiales –que no tienen que ver con la actividad empresarial–, como el gasto de donaciones, tengan límite. Las empresas no se crean para donar sino para generar lucro”, advierte. 

Mientras que Verona estimó que no cree que lleguemos a eliminar este tope fiscal –como ocurre en otros países–, Juan Manuel Salazar, abogado tributarista del Estudio Payet, opina lo contrario. “Hay que incentivar las donaciones y la única forma de hacerlo es mediante beneficios”, resalta. 

“Mientras más difícil sea donar, habrá más espacio para realizar actos ilícitos. Si el proceso es más abierto, es más fiscalizable”, agrega Valencia. 

Para el empresario Franco Giuffra, se debe tener en cuenta también que la donación, cuando se hace en especie, representa un gasto logístico para las empresas, pues debe disponerse de personal para segregar, clasificar y almacenar los productos a donar. 
 
CASO MINERO
Salazar hace hincapié en lo que ocurre en el sector minero y califica de absurdo el tope tributario, pues está en función a la renta neta del ejercicio fiscal. 

“Si no pagas impuestos [en el ejercicio fiscal], no puedes donar. Las grandes mineras invierten cuatro o cinco años en explorar y tienen un ámbito de influencia en el que pueden construir colegios o carreteras. Si deciden hacerlo durante el tiempo de exploración, no es deducible porque no tienen renta”, explica el especialista. 

Además, agrega que dicha donación tampoco podría considerarse en el siguiente período fiscal, lo que, según él, es un gran desincentivo. 

Esta situación, continúa Salazar, ha generado que las propias empresas desarrollen mecanismos para hacer viables las donaciones, como la creación de fundaciones o la activación de las mismas como costo de un proyecto específico. 

BIENES
Para Lía Celi, gerenta general del Banco de Alimentos, la donación y la destrucción de bienes que no se han podido comercializar deben estar en el mismo escalón. Por el contrario, hoy empresas que venden bienes como alimentos o libros prefieren destruirlos antes que donarlos. 

“Si la ley hace que los donantes no nos vean como una alternativa sustentable a la destrucción, sí nos afecta”, explica Celi. 

Por otro lado, Verona recuerda que la vigencia de la norma dirigida a alimentos, aprobada hace dos semanas en el Congreso, comienza el 1 de enero del 2017. “Esto significa que recién en el 2018 podremos cuantificar sus resultados, saber cuántas empresas la están aplicando y si el límite es amplio o chico”, advierte. 

Dicha norma es para Celi un excelente primer paso. “A partir del cambio de la norma en Argentina, Chile y Colombia, las donaciones aumentaron entre 600% y 1.110%”, finaliza.

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