A puertas de las elecciones presidenciales 2021 y bajo un escenario político impredecible por los resultados de las últimas encuestas, resulta conveniente enfocarnos en lo que realmente le interesa a la gente: la viabilidad detrás de las propuestas en los planes de gobierno y como piensan los candidatos contribuir a la reactivación económica, algo tan urgente y necesario en nuestro país.
Si nos enfocamos solo en hidrocarburos, actualmente la producción de petróleo y condensados en el país se encuentra en alrededor de 35.000 barriles por día (bpd), nivel históricamente bajo para nuestro consumo diario. Si a ello agregamos los líquidos de gas natural que producimos diariamente -aproximadamente 85.000 bpd equivalentes-, tenemos que la producción total de hidrocarburos está en alrededor de 120.000 bpd, muy por debajo de los 220.000 pbd que consumimos. Teniendo esto en cuenta, es fundamental volver a impulsar este importante sector.
Considerando la medición más reciente para evaluar a los seis primeros candidatos, en este caso la encuesta Ipsos del último domingo 4 de abril, Yonhy Lescano, del partido Acción Popular, se mantiene primero en intención de voto a nivel nacional. Entre sus principales propuestas destaca que las empresas que hacen consumo intensivo del agua (mineras, cerveceras, cementeras, de aguas gaseosas, etc.) deberán pagar una tarifa de consumo técnicamente calculada.
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Lescano agrega que los servicios de suministro de agua potable, electricidad, telecomunicaciones, gas doméstico y transportes deben ser eficientes y contar con tarifas competitivas. Asimismo, priorizará la inversión en estas actividades esenciales para que estén al alcance de todos los peruanos y combatirá las prácticas ilícitas (tala y minería ilegal) en el manejo de los recursos naturales; de ganar la carrera por la presidencia, su Gobierno buscará proteger los ecosistemas, impulsar la producción de energías limpias renovables y el ordenamiento territorial.
Por el lado de Avanza País, del candidato Hernando de Soto, se identifica perjuicios al medio ambiente que se intensifican por el cambio climático, deforestación, minería y tala ilegal, entre otros. También identifica la alta conflictividad socioambiental entre comunidades y empresas mineras. Propondrá un plan de manejo ambiental para la pequeña, mediana y gran minería. También desarrollará un sistema de participación ciudadana para la protección ambiental. Aunque no lo señala de modo expreso, los planteamientos de Avanza País en este campo también se aplicarían a los proyectos de exploración y explotación de hidrocarburos.
Bajo la conducción de Verónika Mendoza, el partido Juntos por el Perú plantea la creación de un nuevo modelo de distribución de la renta minera y de hidrocarburos, que incluya fondos de estabilización y de compensación para territorios que hoy no cuentan con canon. Propone la diversificación de la actividad económica poniendo énfasis en actividades bajas en emisiones de carbono y la creación de “empleos verdes”.
También sugiere potenciar Petroperú permitiendo el ingreso de inversionistas hasta por un 20% de su capital. Promete la masificación del uso del gas natural sobre todo en el sur del Perú, para lo cual incentiva la construcción de un gasoducto y de una planta petroquímica. Propone además la modificación de la Ley de Hidrocarburos con la finalidad que los licenciatarios ya no sean dueños de los hidrocarburos que extraen, lo cual implica que solo se celebraran contratos de servicios.
En lo que se refiere a Victoria Nacional, con George Forsyth como su candidato, resalta que la excesiva tramitología multisectorial, la ausencia de criterios y procedimientos claros en la revisión de los estudios de impacto ambiental y la deficiente regulación, fiscalización y gestión de procesos, no incentivan la inversión en exploración. En caso de llegar al Gobierno, propone un pacto social entre los concesionarios y el Estado que permita que las empresas reinviertan el 50% de las utilidades generadas en las zonas, a fin de mejorar infraestructura de servicios básicos en las zonas e influencia de los proyectos.
Desde Fuerza Popular, Keiko Fujimori a través de su Plan de Gobierno, se compromete en mejorar la capacidad de respuesta técnica del Minem y del Minam, en calidad y número de profesionales para optimizar los procesos de evaluación técnica, ambiental, social y de permisos. Propone reformular la legislación de la pequeña minería y minería artesanal diferenciando por zonas de operación; asimismo, plantea actualizar los procedimientos administrativos simplificados para autorizaciones de uso de suelos, agua y terrenos superficiales de propiedad del Estado, así como, de terceros.
La noticia de las últimas semanas fue el ascenso de Rafael López Aliaga representando al partido Renovación Popular. Según el plan de gobierno, se buscará atraer inversiones para dotar de mayor valor agregado a nuestras materias primas, promoviendo así las exportaciones. Si bien el sector energético se encuentra aún en búsqueda de estabilidad por la pandemia, afirma que enfocará sus esfuerzos en la generación de energía limpia hidroeléctrica, desarrollando concesiones de generación, transmisión y distribución eléctrica. Además, mediante incentivos a la inversión privada en electricidad, promoverá proyectos nuevos para los pueblos rurales y aislados.
Como vemos, todos los partidos políticos de alguna manera proponen cambios para dinamizar las inversiones en este importante sector de nuestra economía. Es tiempo que el sector hidrocarburos recupere su lugar como una fuente de inversiones, con respeto al entorno social y el cuidado del medio ambiente.
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