La celebración del Día del Turismo en el Perú –ayer 24 de setiembre– llegó con una noticia positiva para el sector: se publicó la norma que da paso a un instrumento de facilitación de inversiones en el rubro.
—La ley que da origen a la ventanilla única de turismo (VUT) acaba de ser publicada. ¿Cuándo estaría operativa?
Antes de todo, debo mencionar que este ha sido un trabajo intenso de un año con la participación del sector privado y del Congreso.
Ahora que ya está publicada la ley, tenemos un plazo de 30 días hábiles para instalar la Comisión Multisectorial Permanente que guiará el proceso de simplificación de los procesos para otorgar permisos y licencias para facilitar la ejecución de inversiones en el sector turismo. Paralelo a ello, tenemos 90 días hábiles para elaborar el reglamento de la VUT, con lo cual hacia febrero ya estaría habilitada para su funcionamiento.
— ¿Para cuándo se verían los primeros resultados?
La primera fase termina en febrero del 2016 y podremos ver resultados iniciales un año después, hacia febrero del 2017. Esto será posible porque ya tenemos identificados un total de 32 procesos para incluir en la VUT, por lo cual el avance será rápido.
— ¿Solo hay 32 procesos que se deben simplificar para agilizar la inversión en el sector turismo o es que se trata de una primera etapa?
La VUT se implementará en dos fases, luego de haberse publicado la ley: la primera involucra hacer el reglamento, instalar la comisión e implementarla en Lima y Callao, que es donde se concentra la mayor inversión de infraestructura hotelera. En una segunda etapa se implementará en otras regiones.
— Imagino que se han fijado metas en cuanto a plazos de implementación. ¿Cuáles son?
Todavía no quisiera comprometerme con fechas porque estamos en la fase de planeamiento. Además, lo más importante es tener el marco legal –que ya está– para luego dar los siguientes pasos.
— ¿Qué tan difícil puede ser implementar la ventanilla, teniendo en cuenta que hay múltiples criterios en las diversas entidades estatales para otorgar licencias y permisos?
Personalmente, no creo que haya mucha dificultad, teniendo en cuenta que con la implementación de la ventanilla única de comercio exterior (VUCE) el funcionario público es más consciente de la importancia de este tipo de instrumentos.
Además, no es que partamos de cero, porque ya identificamos, a nivel de Gobierno Nacional, cuáles son los trámites en los que debemos trabajar para simplificar y estos están en organismos como el Ministerio de Cultura, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas, la Autoridad Nacional del Agua y el Mincetur.
— ¿Y en el ámbito de los gobiernos locales, qué retos han identificado?
Al contestar esta pregunta debo recordar que tenemos identificados los problemas para la inversión en Lima y Callao. Así, nos hemos dado cuenta de que San Isidro tiene 54 requisitos para que una empresa pueda ejecutar inversiones, es el que impone el mayor número de trámites.
Le sigue Miraflores con casi 40. Ahora, para la segunda etapa, que ya involucra al resto del país, vamos a tener que revisar los distintos procedimientos administrativos que tienen las instancias gubernamentales y ayudarlos a elaborar un flujograma que asegure que el trámite sea simple de cumplir.
— ¿Cuánta inversión hotelera podrá destrabarse con la VUT? Canatur estimó que sería alrededor de US$500 millones. ¿Confirma la cifra?
No puedo confirmarla porque ahora último han entrado en operación algunos hoteles, lo que obliga a recalcular el monto. Ahora, para tener las cosas claras, vamos a implementar un observatorio del sector turismo de la mano con Prom-Perú, el cual tendrá como principal tarea validar los montos e intenciones de inversión de infraestructura turística.
— ¿Cuánto ahorro generará la VUT?
Esperamos lograr una reducción del 20% del tiempo de los trámites, con lo cual se espera atraer un 10% más de inversión en turismo. Por ahora no puedo adelantar cifras de montos de inversión, porque eso dependerá de los proyectos que usen la VUT, pero esperamos logros similares a los obtenidos con su par en comercio exterior, que en el componente mercancías restringidas generó ahorros por más de S/.100 millones para el país.