Para el presidente del directorio de Tacama, José Antonio Olaechea, la problemática del pisco va más allá del Concurso Mundial de Bruselas, puesto que son varias las empresas que exportan sus productos a Chile y renuncian a la denominación 'pisco', que es especialmente otorgada por el Estado.
¿Qué está pasando con la denominación de origen de ambos países?
Los productores en Chile, careciendo de imaginación, han copiado el nombre peruano para su producto. Pero ellos han querido santificar su copia creando su propia norma de denominación de origen. Entonces, tenemos dos normas de denominación. La peruana, para el pisco que nosotros hacemos en el Perú, y la copia chilena. Entonces, lo que ha pasado es que el concurso tiene que cumplir con las leyes chilenas.
¿Cómo ve la postura de los organizadores del concurso ante lo que está ocurriendo?
El concurso no tiene la culpa. Va a darse en Chile y está respetando la ley chilena.
¿No debería asumir alguna responsabilidad?
Me parce que están matando al mensajero. Y no es el culpable. El concurso, si lo hacen en Bruselas o en otro lugar del mundo, no va a tener ningún problema en aceptar al pisco. Como es en Chile y las leyes son territoriales, se cumple la ley chilena. Y el concurso es libre de organizarse donde quiera; los peruanos somos libres de ir o no. Nadie nos obliga y no es el único que hay en el mundo, y de calidad.
¿Entonces el problema es que se haga en Chile?
No. Si Chile quiere obligar a Perú a concursar como aguardiente, quiere decir que el Perú no participa. Porque no estamos dispuestos a conceder eso. El Concurso de Bruselas es muy prestigioso. Tacama como pisco ha ganado innumerables medallas de oro, y grandes medallas, pero nadie le ha exigido lo absurdo de negar nuestra legitimidad. Negar que nuestro producto se llama pisco es negar su legitimidad.
De las exportaciones peruanas de pisco, la mayor cantidad llegan a Chile, pero como aguardiente.
Esa es la contradicción. Acá lo que tenemos son dos legislaciones que son excluyentes. Para ir a Chile, es necesario someterse a la ley chilena, que quiere decir declinar a la ley que te da nacimiento. La denominación de origen es un derecho que es del país y que se le otorga al productor. Entonces, si yo me voy a Chile y reconozco a la ley chilena, declino a la peruana, por lógica.
¿Es conveniente para los negocios que se deje de exportar a Chile?
No podemos estar en la procesión y replicar las campanas. ¿El pisco es peruano, o no? Tenemos que tomar una decisión, no todo es comercial; no todo pasa por el dinero. Hay temas que tienen que pasar por principios. Si [el pisco] es peruano, y tenemos que protegerlo, no podemos estar exportándolo con otro nombre. Tenemos que tener sindéresis, decir lo que pensamos y actuar como pensamos.
Entonces, ¿Las marcas deben dejar de hacerlo?
Que lo exporten como pisco, si es lo que es. ¿Por qué tenemos que exportarlo con otro nombre? ¿Por qué nos tenemos que someter a la ley chilena y exportarlo como aguardiente? Es complicado. Pero tenemos que tomar decisiones empresariales de largo aliento, no de corto plazo.
Vemos que el chileno se mueve de manera agresiva en el mercado. ¿Qué está pasando en el Perú?
El país está trabajando a nivel internacional para el reconocimiento del pisco. Lo bueno es que ha logrado que ese reconocimiento se dé. Lo que habría podido pasar sin ese trabajo es que la denominación de origen pisco la perdíamos, cuando justamente el Perú tiene la historia, la geografía, la actividad, el proceso; lo tiene todo. Hemos llegado a una situación de empate [con Chile], habiendo podido ganar el partido. Eso es clarísimo. Pero por lo menos, el Perú está en los mercados del mundo, y compite. El único que lo excluye es Chile.
Desde su punto de vista, ¿Qué debe hacer el Perú a futuro para proteger la denominación?
Yo creo que comunicarse con los productores que no han visto este ángulo. [Explicar] que hay que cuidar el patrimonio en el Perú.
Y viceversa.
Así es. ¿Pero quién quiere el pisco chileno acá? Nadie. Los que quieren el pisco peruano son los chilenos.
Aunque es con otro nombre.
Allá lo llaman pisco peruano, no le ponen otro nombre. La verdad es que en el mercado chileno lo conocen como pisco peruano. Y en el Perú hay cientos de productores; en Chile hay cinco cooperativas. En Chile no es una verdad histórica.
Desde el sector privado, ¿se están haciendo campañas para impulsar a esta industria?
Siempre. La sociedad de industrias promueve una serie de ferias a las que vamos todos los productores juntos y es muy bueno. Y sin duda, el estado ha apoyado mucho .
¿Considera que el Estado está haciendo una buena labor?
Creo que es una labor encomiable, muy buena. El Perú está conduciéndose en los foros internacionales, ciertamente tenemos un competidor muy agresivo, los intereses comerciales vitivinícolas chilenos son amparados y protegidos por el estado chileno y quiere decir que hay una unión que favorece mucho a la industria, a la generación de empleo en Chile y al desarrollo de sus exportaciones.
¿Eso está ocurriendo en nuestro país o todavía no?
Yo creo que en el Perú hemos venido desarrollando un trabajo consistente después de muchos años de abandono, que poco a poco va dando sus frutos. El Perú, aparte de Chile, puede exportar a donde quiera su pisco sin restricciones y creo que ha sido trabajo de nuestras autoridades. El ideal hubiera sido que Perú tuviera en exclusiva el derecho del pisco a nivel mundial como lo tienen otros productos, pero no ha sido el caso.
Las negociaciones no tuvieron éxito.
Básicamente lo que hemos hecho es igualar fuerzas a nivel internacional. Hay muy pocos países en los que el Perú tiene el derecho exclusivo, pero nada que sea un mercado relevante. En los grandes mercados, los piscos pueden entrar y el aguardiente chileno que llaman pisco también.
¿El Estado está difundiendo correctamente el pisco?
Promperú ha hecho unas campañas maravillosas. La colaboración cada vez está mejor. Sin duda vamos a mejorar en el tiempo. Sin duda todas estas turbulencias de hoy sirven para mejorar, para tener las cosas más claras. El pisco no es negociable, el pisco es pisco en el mundo y no podemos llamarlo aguardiente en ningún lado. Llamarlo aguardiente es debilitar la tesis peruana. En el concurso no podemos llamarlo aguardiente, tampoco en las exportaciones. Tenemos que llamarlo pisco.
¿Cómo se compara la presencia del Perú en mercados internacionales versus la de Chile?
Considero que ya estamos más fuertes en la parte de comercialización. Yo creo que hoy día el Perú está presente en los mercados más importantes y nuestro producto es organolépticamente mejor que el producto chileno. Es un producto cuyo origen es diferente a las uvas chilenas, cuyo proceso de elaboración y presentación es diferente. Responde a una tradición centenaria que no tiene Chile.
Regresando a la controversia del concurso, ¿el Estado no debería tomar cartas en el asunto?
No. El concurso está respetando la ley del país en el que va a tener lugar. Y los peruanos no debemos de aceptar someternos a la ley chilena.
De las 18 marcas que están yendo al concurso, ¿ves correcta la decisión de sancionarlas?
Yo creo que Indecopi tiene que dejar clara la posición peruana como lo está haciendo. Ningún autorizado a utilizar la denominación de origen pisco puede internacionalmente ir en contra del propio derecho que tiene el Perú. Pero yo no voy a pedir que sancionen a mis pares peruanos. Es muy difícil hacer industria en el país.
Entonces, ¿qué se debe hacer con esas marcas?
Por lo menos advertirles que no tienen que ir, porque va en contra de los intereses del Perú. La denominación de origen no es de ningún productor, es de todos los peruanos, el titular es el Estado peruano. productor de pisco peruano tiene su ley peruana y no puede someterse a la chilena negando su denominación de origen y llamándose aguardiente. Es tan claro, no entiendo cómo no lo entienden.
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