La Asociación Nacional de Gremios Pyme Perú sostuvo que es prudente que se pueda aplicar la prórroga hasta fin de año del acogimiento a la reprogramación y congelamiento de deudas en el marco del Programa de Garantías COVID-19, tal como lo plantea la Comisión de Economía del Congreso.
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Actualmente, la medida se mantiene vigente hasta el próximo hasta el 31 de agosto, pero el proyecto del Poder Legislativo podría ampliarse debido a que el coronavirus está generando un mayor impacto en la economía de las personas y empresas.
“Estamos de acuerdo con una ampliación del plazo porque el sector mipymes atraviesa una crisis severa. Las mipymes no solo tienen préstamos de consumo, sino también por créditos vehiculares o hipotecarios”, comentó Ana María Choquehuanca, presidenta de la Asociación Nacional de Gremios Pyme Perú.
Además, la representante de este gremio mencionó que debería existir una precisión porque algunas entidades financieras, que se suscribieron al convenio, no están aplicando este programa.
“Falta una difusión por parte de las entidades bancarias y del Gobierno, pero siendo Cofide la parte central debe transparentar los convenios de quiénes son y exigir que se cumplan, para eso no tiene que olvidarse de trabajar de la mano con la SBS e Indecopi”, manifestó.
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Choquehuanca también señaló que se debe apreciar el panorama antes de fin de año para saber si pedir otra ampliación para el programa de garantía estatal.
“Hay que trabajar en función de lo que pasa. En este momento un plazo prudencial de la reprogramación de esos créditos es hasta fin de año, luego en diciembre vamos a tener un panorama más claro”, precisó.
MEJOR EJECUCIÓN
Para Jorge Ochoa, presidente del Gremio de la Pequeña Empresa de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), cualquier iniciativa de apoyo como reprogramaciones es bienvenida, pero la idea es cómo se está ejecutando.
“Se tiene que ver cómo llegar a un número mayor de empresas. Hemos visto que los Reactiva Perú, FAE-Mype, PAE-Mype, son buenas ideas, pero se tiene que beneficiar directamente a los que están golpeados hace un año”, mencionó.
Agregó que la banca privada defiende sus intereses, así que es muy probable que esos mecanismos no les interesen a todos los actores.
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“Al grueso de las microempresas no hay que reprogramar porque no llegó ese dinero a los que realmente se ven súper perjudicados”, acotó.
Ochoa también sostuvo que muchas mypes no reprograman sus deudas por falta de conocimiento o difusión.
Según Cofide, hasta el 25 de marzo, el programa de Garantías COVID-19 logró favorecer a 73.758 personas y mypes, con la extensión de certificados de garantías que respaldan sus créditos reprogramados por más de S/ 161 millones. Es decir, solo se ejecutó casi el 3% de los S/ 5.550 millones que el Gobierno designó para esta modalidad.
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