No importa la cábala que sigas, es casi un designio que luego de las fiestas de fin de año, lo primero que percibes al renovar el armario son unos kilos de más a causa del consumo de alimentos ricos en carbohidratos, grasas y azúcares. Solo en la cena navideña puedes llegar a consumir la cantidad de calorías que necesitas en un día. ¿Te imaginas lo que puede haber pasado en un mes?
Por eso, entre tus propósitos del 2015, te recomendamos incluir una nueva dieta que, además de frutas y verduras, incluya el pescado y la pota como alternativas saludables, deliciosas y con alto contenido de Omega 3, ideales para combatir esos kilitos extras. Carlos Rubiños, nutricionista del Programa Nacional A Comer Pescado, del Ministerio de la Producción, afirma: “La mejor manera de iniciar el 2015 de manera saludable y lleno de energía es con una dieta donde el pescado sea el principal protagonista, por ser un alimento altamente nutritivo y bajo en calorías”.
Mira esta receta de tallarines con pota aquí.
Súper pescado
Más allá de la temporada veraniega, el pescado es de consumo básico en cualquier época del año porque, gracias al Omega 3, un ácido graso saludable, contribuye a disminuir el colesterol y el nivel de grasa en la sangre y, en consecuencia, previene las enfermedades cardiovasculares.
Los pescados que mejor cumplen esa función son los de carne oscura, es decir, el jurel, la caballa, la anchoveta, el machete y el bonito, que son, además, propicios para el consumo porque no corren peligro. Adicionalmente, la pota es otra opción sabrosa para variar el menú casero, con pocas calorías, abundantes proteínas y un precio muy accesible.
Prepara esta nutritiva receta de bonito a la plancha con puré de quinua.
Consumo responsable
Si desea disfrutar de las bondades que ofrece nuestro mar, tenga en cuenta que no todas las especies de pescado están disponibles, pues existen muchas, como el lenguado, la chita, la corvina, el mero, el atún de aleta amarilla, la cabrilla y el cherlo, que tienen una alta demanda, motivo por el que su población y su hábitat natural se hallan en riesgo latente. Pruebe reemplazarlos con otras variedades igual de deliciosas como la lorna, la lisa, el jurel o la cachema.