Hace 20 años la tierra tembló en Nasca

Hace 20 años las placas de Nasca y Continental se rozaron remeciendo violentamente diez departamentos del Perú, y provocando 17 muertos, 1.600 heridos y 94 mil damnificados. Aunque los primeros informes de los corresponsales de El Comercio indicaron un saldo de siete muertos, esta cantidad se fue ampliando con las horas. Los 6.4 grados en la escala de Richter se sintieron en Ica, Nasca y Arequipa, principalmente.
 
Un minuto antes del mediodía del 12 de noviembre de 1996, el suelo tembló y sembró el terror en gran parte del sur de nuestro territorio. Otros departamentos afectados fueron Lima, Moquegua y Tacna, en la costa. También sufrieron los embates de la naturaleza Ayacucho, Junín, Huancavelica, Apurímac y Cusco en la sierra peruana.
 
Desde el lejano 1940 el territorio nacional no soportaba un sismo similar como este, cuyo epicentro estuvo a 135 kilómetros al suroeste de Nasca, y a una profundidad de 46 kilómetros en el mar. Su duración fue de 1:58 segundos.

 
Mientras los habitantes de las localidades más afectadas, como Nasca e Ica, se sobreponían de la angustia de ver sus casas derruidas, 80 réplicas aumentaron la sensación de miedo y desamparo entre la población. Una de ellas, que se produjo a las 9:41 de la noche, alcanzó los 4.2 en la escala de Richter
 
Al día siguiente fue declarado el estado de Emergencia por 60 días en la zona afectada. Asimismo, en tres vuelos llegaron los primeros envíos de ayuda consistente en herramientas, frazadas, carpas y abrigos. Dos días después del sismo empezó la remoción y limpieza de escombros, especialmente de las viviendas de adobe, que en su 80 por ciento se derrumbaron.

 
Datos
 
Luego del sismo se atendió a la joven Luz Falconí García, quien debido a la situación presentada adelantó su parto. Ella fue sometida a una cesárea que resultó exitosa.
 
Hubo intentos de pillaje por parte de algunos indeseables que querían aprovecharse de la desgracia del prójimo, pero la presencia de la policía evitó la ocurrencia de estos actos inhumanos.
 
Las muertes se produjeron principalmente porque las estructuras de la mayoría de viviendas del área no estaban acondicionadas de manera antisísmica.

 
Una cruzada promovida por el alcalde Alberto Andrade halló eco en los vecinos de la capital que llegaron hasta el Complejo Deportivo de Miraflores “Niño Héroe Manuel Bonilla” para donar ropa y víveres.
 
Bolivia y Chile fueron los primeros países en alcanzar ayuda humanitaria de emergencia para las víctimas del terremoto de Nasca.
 
El techo y altar de la iglesia de Santiago de Acarí, en Arequipa, se desplomaron por efectos del terremoto.