Cuenta la leyenda que la pantomima nació en el siglo XIII cuando la Santa Iglesia prohibió a los actores hablar. Así el arte del silencio perduró en el tiempo y fue transmitido de pueblo en pueblo. El Perú tiene en Juan Piqueras Sánchez-Concha a su máximo gestor. Hoy a los 82 años el mimo y profesor falleció en su casa de Barranco.
Hijo del escultor Juan Piqueras Cotoli y de Zoila Sánchez Concha, Juan Piqueras nació el 20 de agosto de 1934. Su infancia transcurrió en el barrio de Malambito donde era conocido por sus imitaciones. Estudió en La Recoleta y luego ingresó a la escuela de arte de la Universidad Católica donde fue alumno del profesor italiano Bruno Roselli, protector de los balcones limeños.
En la década del 60, Juan Piqueras se desempeñaba como cartelista cuando se interesó por la pantomima. Siguió un curso con Sergio Arrau de teatro y mimo. Su primera presentación la hizo con la Compañía Nacional del Mimo. Luego integró la Asociación Cultural Jueves, fundada por Alejandro Miró Quesada, Raúl Ferrero Costa y Miguel Vega Alvear. Posteriormente fundaría su grupo “Los mimos de los jueves”.
Para ser mimo Juan Piqueras recomendaba: “ser un trabajador constante de su cuerpo e intelecto”. Enseñó a varias generaciones de escolares y universitarios.
En su casa de la Bajada de Baños, en Barranco, abrió la Sala Juan Volantín en honor al poeta José María Eguren. Allí con su esposa Carmen Caro presentó obras para niños y adultos. Juntos formaron el famoso grupo de Mimo Piqueras.