Esta mañana fue clausurada una fábrica clandestina de conservas de pescado, ubicada en el asentamiento humano Daniel Alcídes Carrión, en el Callao. En el lugar se encontró varios kilos de pescado podrido y expuesto a la suciedad.
Agentes de la comisaría de Sarita Colonia en compañía del Ministro del Interior, Daniel Urresti, revisaron las instalaciones y encontraron también máquinas oxidadas para procesar el pescado. Debido a la putrefacción del alimento, el local estaba lleno de moscas y cucarachas.
Además, se descubrió que los productos eran etiquetados con marcas reconocidas e incluso tenían fecha de caducidad. Estos eran vendidos en tiendas cercanas a la zona.
La Policía clausuró la fábrica y detuvo a nueve trabajadores. Todavía se investiga en qué otros puntos se vendían las conservas de pescado.