El defensor del Pueblo, Eduardo Vega Luna, remitió una carta al alcalde (encargado) de la Municipalidad de Lima, Hernán Núñez, y al presidente del director de Protransporte, Gustavo Guerra García, en el cual menciona cuatro puntos álgidos para resolver en la puesta en marcha del denominado corredor azul.
Compartimos aquí el total de las apreciaciones hechas por la Defensoría del Pueblo para este sistema de transporte, puesto en marcha desde el 1 de setiembre:
1. Puntos de congestión en el corredor.- Un ejemplo es el paradero Virú, en el que se concentran los pasajeros que provienen, en su mayoría, de los distritos de San Juan de Lurigancho y Rimac, quienes deben realizar transbordo para llegar a distintos puntos del corredor. Otro es el paradero Amancaes, en el que existe aglomeración de personas que esperan a las unidades de transporte para trasladarse a otros puntos del distrito del Rímac.
2. Frecuencia insuficiente en el paso de los buses.- Los buses tardan en llegar a cada paradero entre 5 y 8 minutos, lo que ocasiona que, aún en horas de menor afluencia de público, se formen largas colas en los paraderos. Esto ocasiona que los tiempos de espera sean mayores.
3. Insuficiente información sobre los lugares de embarque en los buses y en los paraderos.- En el interior de los buses no existe información que indique cuáles son los paraderos de la línea respectiva y tampoco se anuncia la llegada a cada paradero. Asimismo, en los paraderos ubicados en la vía pública no se encuentra información de las paradas que realiza cada línea del corredor. De otra parte, los folletos entregados por los inspectores no cuentan con información sobre los paraderos de las rutas que circulan por el corredor.
4. Insuficiente información sobre el cambio de rutas de las unidades de transporte público que continúan en circulación.- El primer día se detectó que algunas unidades de transporte público que inicialmente circulaban por el Jr. Washington, en horas de la tarde eran desviadas por la Av. Guzmán Blanco hacia la Av. Alfonso Ugarte. De otro lado, las unidades que por la mañana circularon por el Jr. Rufino Torrico, en la tarde dejaron de hacerlo por dicha vía. Ambas situaciones generaron congestión vehicular y confusión en los pasajeros.
Más adelante, la Defensoría remarcó un factor que algunos especialistas tocaron en los últimos días: el encarecimiento del costo de vida para algunas personas que antes recorrían el corredor pagando un solo pasaje.
"Por ejemplo, quienes tienen como punto de origen los lugares señalados, actualmente deben pagar S/. 1.50 para llegar a ciertos puntos de intersección del corredor vial Av. Tacna - Av. Garcilaso de la Vega - Av. Arequipa (Jr. Virú, Av. Bolivia y Av. 28 de Julio), para luego abordar uno de los buses del corredor y llegar a su destino final. En otros casos, incluso, deben realizar una tercera conexión, lo que encarece aún más el servicio de transporte", indica.
Por último, Vega Luna solicitó a la comuna capitalina que informe sobre las acciones que se tomarán en torno a las observaciones planteadas.