La Gerencia de Transporte Urbano (GTU) de la Municipalidad de Lima declaró infundada la impugnación de la Municipalidad de Barranco a la resolución que dispone el cierre temporal de dos carriles del sentido sur – norte de la Costa Verde, entre la Bajada Agua Dulce y la Bajada Armendáriz.
Con esa medida, la comuna metropolitana sostiene –a través de un comunicado- que la vía administrativa ha quedado agotada, por lo que exhorta a Barranco a ejecutar la clausura de la vía, como lo solicitó ante el riesgo de derrumbes en los acantilados.
La municipalidad barranquina había impugnado la resolución de Lima argumentando que esta tiene la competencia para el cierre de la vía. En esa línea, consideraba que se le estaba obligando a intervenir en territorios que no son de su competencia.
Sin embargo, basándose en normas como la Ley General de Transporte y Tránsito Terrestre, la comuna metropolitana sostiene que a Barranco le corresponde el cierre, pues ha solicitado el mismo y además la posibilidad de derrumbes se dan en un espacio de su propiedad.