Una joven de 18 años falleció de una bala perdida en la cabeza mientras dormía dentro de su vivienda, ubicada en el Rímac. El hecho ocurrió la noche del último domingo, un día antes de que la víctima celebrara su cumpleaños número 19. La madre de esta denunció el crimen ante las autoridades y pidió que se haga justicia.
Nayeli Villarreal Salazar, la víctima, descansaba en su dormitorio cuando recibió el impacto de bala que provocó su fallecimiento. Su madre contó que aquella noche escuchó un ruido extraño al que no le dio importancia pensando que eran generados por las mascotas de la casa.
“Escuché que era como un cohetecillo, pero no tomé mucha importancia porque tengo dos gatos y dije ‘seguro el gato ha saltado y sonó la calamina’”, dijo Jenny Villareal, madre de la joven, al noticiero América Noticias.
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Luego, relató que su otra hija le dio aviso de que Nayeli no despertaba y sangraba por la nariz por lo que de inmediato llamaron a la Policía Nacional. Los peritos de Criminalística llegaron hasta el inmueble situado en el pasaje 41 de San Juan de Amancaes y determinaron que la causa de la muerte de la joven fue un impacto de bala en la cabeza que ingresó por el techo de calamina.
En total, los agentes hallaron tres casquillos de bala en la casa. La madre de Nayeli descartó una venganza contra su familia porque nunca han recibido amenazas por lo que pidió a las autoridades hallar al responsable. Ella cree que los disparos eran dirigidos a otra persona -cuya identidad se mantiene en reserva- que vive cerca de su domicilio.
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“Que la Policía esclarezca este caso, que agarren a los responsables o responsable porque no es justo que uno esté descansando y le caiga una bala perdida. No es justo”, agregó Jenny Villareal.
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