Ameba 'come cerebros': un año después Mateo regresa a casa tras 17 operaciones

Cuando el pequeño Mateo cayó enfermo, hace 11 meses, los médicos le dijeron a su madre: "No leas lo que dice en Internet". Si uno busca información sobre la ameba ‘Naegleria fowleri' que contrajo este niño encontrará que se trata de un bicho microscópico capaz de matar en cuestión de días. No en vano lleva el incómodo sobrenombre de ameba "come-cerebros". 

Mateo pertenece al 1% de casos que sobrevive a esta ameba a nivel mundial. Perdió cerca de 20 kilos y durante 40 semanas la ameba alojada en su cerebro inmovilizó toda la parte izquierda de su cuerpo. Hoy por la mañana, este pequeño de 12 años dejó la clínica recuperado y de buen humor, para retomar su vida en compañía de sus amigos y familiares. 

–Naegleria fowleri–
En el ámbito de la medicina se le conoce como el mal de los nadadores: es causado por un parásito que puede afectar a cualquier persona que se sumerja en aguas infestadas. Ingresa por la nariz y viaja hasta el cerebro ocasionando severos daños en el tejido. 

Los médicos determinaron que Mateo contrajo la ameba tras un viaje a Iquitos, en julio del año pasado. A los pocos días de regresar de la selva, presentó fiebre constante pero nadie lograba hallar la causa. Cuando Mateo sufrió dos infartos cerebrales y privación sensorial, se determinó que había contraído el parásito mortal.

Mateo empezó a tomar 14 pastillas al día, entre ellas, tres cápsulas de Impavido, un fármaco que no se vende en el Perú y bordea los 19.000 dólares en su presentación de 28 unidades en Estados Unidos. A través de donaciones, los padres pudieron conseguir este medicamento. Es gracias a su caso que ahora el Perú expende gratuitamente este medicamento a los futuros pacientes que puedan contraer la ameba.

Al inicio, Mateo fue sometido a innumerables resonancias magnéticas. En octubre del año pasado, los exámenes para detectar la ameba salieron negativos, pero poco después le detectaron un trombo (coágulo) en la pierna. En noviembre sufrió una hemorragia intracraneana y un aneurisma que reventó. Pasó tres semanas en la Unidad de Cuidados Intensivos y la ameba volvió a aparecer en su cerebro.

Desde entonces, los médicos ha operado 18 veces en el cerebro a Mateo, y en todos estos meses él ingresado más de 50 veces a la sala de cirugías. Alrededor de 20 médicos han seguido su caso, incluidos especialistas de Estados Unidos que llegaron al Perú exclusivamente para estudiar su caso, el cual fue considerado como objeto de estudio. 

–En detalle–
El nombre científico de la ameba que se aloja en el cerebro de Mateo es ‘naegleria fowleri’. Vive en agua fresca y caliente, pero no es exclusiva de los ríos de nuestra selva.

“Esa ameba está en muchos ambientes acuáticos. Pero solo afecta a las personas cuando se encuentra en su estado trofozoíto (cuando pierde sus aletas, deja de nadar y comienza a reptar). Ingresa por las fosas nasales y en muy extraños casos se adhiere al nervio olfatorio y se mete al cerebro a través del hueso etmoides. Una vez allí es capaz de segregar una enzima que destruye la masa cerebral hasta producir una meningoencefalitis”, dice Ernesto Bustamante, ex jefe del Instituto Nacional de Salud.

SOBRE LA AMEBA QUE ATACÓ A MATEO

¿Cómo actúa?
Está en casi todos los ambientes acuáticos, pero solo afecta a las personas cuando está en su estado trofozoíto (cuando pierde sus aletas y comienza a reptar). Ingresa por las fosas nasales y en extraños casos se mete al cerebro a través de la nariz. Allí segrega una enzima que destruye la masa cerebral y produce una meningoencefalitis.

Caso extraño
Si bien hay siete casos de víctimas de amebas actualmente en el Perú, la ameba que se alojó en el cerebro de Mateo tiene características únicas. Se informó que su caso es materia de investigación en juntas médicas internacionales.

Costo impagable
El único medicamento capaz de luchar contra esa ameba es la miltefosina (comercialmente conocido como Impavido). Es un fármaco que aún está a prueba. El tratamiento mensual bordea los US$57.000.